“Una vacuna contra la violencia”

(Foto: César Cabrera)
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Morelia, Mich. | César Cabrera/Acueducto Online.- A decir del gobernador Alfredo Ramírez Bedolla, además del covid-19, se enfrenta otra pandemia y es la violencia contra la mujer. Por ello, en conjunto con autoridades municipales, educativas, empresarios y sociedad en general, emprenden un programa que busca lograr la independencia económica del sector femenino.

La presentación de este programa tuvo lugar en uno de los salones de la Casa Michoacán. Mujeres de diferentes municipios –y algunos alcaldes-, se dan cita. El inmueble luce prácticamente abarrotado y, por ende, la organización se ve rebasada. La gente se mueve de un lugar a otro; ya sea para saludar o simplemente tomarse la foto con algún conocido o funcionario estatal.

Hay mucho ánimo, aunque poca formalidad. Y es que el evento, programado para las 13:00 horas, se retrasó casi media hora. Aun así, cada quien aprovecha para platicar con el de junto, tomarse una selfie, contestar una llamada o simplemente esperar.

Una vez que arriba el mandatario, arranca la presentación del programa. Datos duros, fuertes, son revelados por Tamara Sosa Alanís, secretaria de Igualdad Sustantiva y Desarrollo de las Mujeres Michoacanas: imperan los estereotipos y la falta de oportunidades para la mujer, además de que se cuentan por miles las violentadas en materia económica.

Le sigue Areli Gallegos Ibarra, titular de Sí Financia, quien agrega que el 63 por ciento de las mujeres –un millón aproximadamente-, dependen de los ingresos obtenidos por su pareja o familiares. De ahí, dijo, la necesidad del programa que, apoyada por gráficas, explica.

Tan propio de la mujer fue este evento que el gobernador es el último en hablar. Y lo hace no para compartir datos o más información sobre el programa. En esencia, el mandatario afirma que esta es una vacuna para atender la violencia, una muy buena, a su parecer.

Al término de su discurso, nuevamente el desorden, el caos. Las presentes se acercan al presídium, al tiempo que Ramírez Bedolla abandona el salón. Así comienzan otros 20 minutos de sesiones de fotos, saludos y presentaciones. Mientras tanto, afuera, la lluvia hace su presencia.