Morelia, Mich. | Xana Zamudio.- “En tanto que no se presente con vida a los detenidos desaparecidos, es una herida que sigue abierta, no solamente para nosotros como frente, no solamente para los familiares de ellos, sino para todo el pueblo mexicano”.
En vísperas del Día Internacional del Detenido Desaparecido, aprobado en la sesión del Consejo de Derechos Humanos de la ONU realizada en Ginebra, Suiza, el 29 de junio de 2006, el Frente Nacional de la Lucha por el Socialismo (FNLS) emprendió actividades con un pronunciamiento para la presentación con vida de todos los detenidos desaparecidos en el país.
De acuerdo con la Convención Internacional para la Protección de todas las Personas contra las Desapariciones Forzadas, se entiende por desaparición forzada el arresto, detención y secuestro que sea obra de agentes del Estado o personas que actúan bajo su paraguas, seguido de la negativa a reconocer su desaparición.
Según los datos más recientes, México acumula desde 1964 a la fecha un total de 73 mil 201 personas desaparecidas y tres mil 978 fosas clandestinas, informó el medio de comunicación El Sol de San Luis Potosí.
Representantes del FNLS, afirmaron en rueda de prensa, que, por su parte, llevan una relación de más de 5 mil personas víctimas de desaparición forzada en el último sexenio en el estado de Michoacán, considerando el caso ya cerrado de la desaparición de Nilda Rosario de La Cruz, de quien se determinó, un año después de su desaparición, la causa de su muerte por asfixia mecánica por estrangulamiento a manos de su pareja Nicolás N.
Sin embargo, la preocupación del movimiento no sólo radica en la desaparición forzada de personas, sino, además, los casos no resueltos de lo que para ellos son considerados presos políticos.
“Tanto nos duele la desaparición forzada de nuestros compañeros, como nos duele la desaparición forzada por motivos políticos o sociales de cualquier mexicano. Desde la oficialidad se dice que ya es cosa del pasado, pero la persistencia de cometer este crimen significa que todavía existe”.
Es el caso del profesor de educación indígena Leobardo Reyes Meza, detenido el pasado 29 de junio, y reportado por sus familiares como desaparecido durante tres horas, sin que se supiera de su paradero, para luego ser trasladado a una prisión de alta seguridad en la ciudad de Morelia.
“En la cuestión de nuestros compañeros, se les encarcela por participar en una organización de carácter independiente, por luchar por la defensa de la tierra, por la defensa de la educación y por ejercer nuestro derecho a la protesta”.
“Recalcar que en Michoacán hay presos políticos, no solamente nuestro compañero Leobardo, hay presos políticos de la comunidad de Nahuatzen, de la Escuela Normal de Tiripetío y de la comunidad indígena de Caltzontzin en Uruapan”, puntualizaron.
