Morelia, Mich./Acueducto.- Diego Sexto, fundador de las Brigadas de Belleza itinerante, un movimiento de estilistas que dan apoyo y acompañamiento telefónico a personas vulnerables durante esta contingencia por el Covid-19, comparte que “la gente quieres ser escuchada, y es ahí donde entra el carisma de los estilistas”.
Y es que ese carisma, además de su capacidad de escuchar y empatizar es lo que crea la cercanía y confianza, Sexto expuso que la mayoría de las personas con quienes han hablado cuentan su día, sus preocupaciones sobre la pandemia y principalmente de la familia, de que los hijos siguen trabajando y están preocupados por ellos.
Debido a la cuarentena “los apapachos estéticos” han parado, pero una vez finalizado este periodo de aislamiento todos los que forman parte de las Brigadas esperan retomar sus actividades y continuar con esta labor social.
La Brigada realiza acciones solidarias en reclusorios, albergues, casas hogar y con mujeres víctimas de violencia de género o que tienen alguna discapacidad.
Los apapachos estéticos no buscan más que llevar alegría, levantar el ánimo y mejorar la autoestima mediante un cambio de imagen, con un tinte, un corte de pelo, un manicure, limpieza facial o enseñando técnicas de maquillaje, informó Diego.
“Hay mujeres a las que no les gusta verse al espejo, incluso hay quien ya no se reconoce, el tiempo pasó, viven en reclusión, padecen una enfermedad crónica degenerativa, alguna discapacidad, tienen la huella de una operación, se les cae el cabello debido a un tratamiento, tienen la marca de la violencia de género o están reconociendo su nuevo yo, definiendo su género” comentó el fundador de las Brigadas.
A estas mujeres es a quiénes esta red de profesionales de la belleza dan un apapacho estético, buscando así no sólo hacerlas sentir bien al ver su imagen, sino también ayudarlas a recuperarse de sus procesos emocionales, no dejarlas solas.
Con información de Tania Casasola, Animal Político.
