Morelia / Nancy V. Herrejón
En rueda de prensa en el Supremo Tribunal de Justicia del Estado de Michoacán (STJEM) Margarita Jiménez Meza, Verónica Rodríguez y la Lic. Yanitzia Juárez informaron acerca de la situación jurídica de José Antonio Arreola, José Luis Jiménez Meza y José Gerardo Talavera Pineda, presos políticos integrantes del Concejo Ciudadano indígena de Nahuatzen (CCIN).
Se mencionó que el día de hoy se tenía la audiencia para presentar pruebas para la apelación del cargo de sabotaje en contra de los detenidos, la cual consta de una pena de 7 años, más los familiares e integrantes del CCIN lucharán por la liberación de sus compañeros, todo por la vía legal “nosotros no caeremos en sus formas” aseveró la licenciada Juárez.
Manifestaron que la Fiscalía General del Estado de Michoacán (FGEM) se ha conducido de manera reprobable con ellos, pues aseguran que los detenidos se les ofreció aceptar unos cargos a cambio de otros, más ellos (detenidos) los rechazaron, además agregaron que una vez ya detenidos la Fiscalía pidió tres meses para presentar pruebas, hecho ilógico, ya que como se presentaron los eventos de detención era para que ya tuvieran las pruebas.
“Cuando a los presos los detuvieron en un inicio la Fiscalía quedó de proporcionar un diálogo con nosotros, más no nos han querido recibir” dijo Margarita Jiménez, hermana de uno de los detenidos. Agrega que a su hermano se le ubica en el lugar de los hechos cuando los testigos en los que se sostiene la versión han presentado declaraciones que se contradicen, espera que la Magistrada en turno valore esa noción.
Además de estos tres detenidos, quienes están en el Centro de Readaptación Social (CERESO) de Uruapan, estos en libertad ejercían como autoridades en el CCIN del 2018 al 2021; se sabe de dos órdenes de aprehensión, una en contra del padre de uno de los detenidos y de una de las voceras en rueda de prensa, “mi papá es un hombre de 69 años de edad, el 01 de octubre lo han querido detener de una forma violenta, él es una persona de la tercera edad, él ya no va andar de revoltoso, lo quisieron encañonar los ministeriales de Nahuatzen”
El padre de Margarita Jiménez tuvo que esconderse en la casa de un vecino, tuvo que escabullirse entre los tejados de las demás viviendas, aunque él cuenta ya con un amparo que lo respalda ante tal detención los policías amenazaron con llevárselo. “La Fiscalía nos está dando por donde quiera” dice Margarita, quien ubica que tal represión es porque han decidido autogobernarse.
