Ario de Rosales, Mich. | Acueducto Online.- A 207 años de la instalación en este lugar del primer Supremo Tribunal de Justicia en el país, siguen más que vivos los ideales sustanciales del ordenamiento social que en aquel tiempo planteó don José María Morelos.
Lo anterior fue dicho por el orador oficial del evento, Oscar Escobar, diputado local, quien añadió que México y Michoacán sin duda deben tener viva la esencia formadora de instituciones que garanticen la igualdad entre sus gobernados.
Es por ello que, continuó, los que conformamos la sociedad actual, estamos obligados a defender este legado que se concibió con sangre y esfuerzo por nuestros libertadores. Debemos luchar todos los días por tener un País con leyes e instituciones fuertes, que defienda los derechos de todos por igual.
Y, resaltó, fue en este municipio, donde se plasmaron las bases sólidas del sistema de justicia que rige a nuestro Estado Mexicano, donde Don José María Morelos y Pavón, Siervo de la Nación, culminó su anhelo de salvar a los humildes de la esclavitud, de la explotación y de la injusticia. Lugar donde los ideales de nuestros libertadores Hidalgo y Morelos, fueron acuñados para forjar la utopía impensable de un pueblo igualitario.
Discurso completo
En memoria y reconocimiento a los primeros Magistrados del “Primer Supremo Tribunal de Justicia Ario 1815”: Mariano Sánchez Arreola, José María Ponce de León, Mariano Tercero y Antonio de Castro.
Durante el movimiento de independencia, los mexicanos tuvimos inigualables héroes que lucharon por la causa revolucionaria de una Nación libre. Mujeres y hombres que imaginaban una tierra con: justicia, igualdad y desarrollo.
Dentro de ese movimiento Insurgente existió un Michoacano con visión de Estadista que tenía una idea clara: “después de esa lucha armada, se tenían que fincar las bases Institucionales para construir una Nación: libre, fuerte y sólida”. El Michoacano Don José María Morelos y Pavón, fuel el primer precursor de instituciones tan importantes para el México actual.
El 13 de septiembre de 1813, el cura Morelos convocó al Congreso de Anáhuac en Chilpancingo, al día siguiente presentó su documento conocido como los “Sentimientos de la Nación”, que planteó los lineamientos de la Constitución que habría de formular el Congreso, entre ellos: que América es libre e independiente de España y de toda otra Nación; que la soberanía dimana del pueblo; y que las leyes deben moderar la opulencia, de tal suerte que se aumente el jornal del pobre.
En esos Sentimientos de la Nación, el libertador fincó los antecedentes de la Constitución de Apatzingán, donde planteó la instalación de un Supremo Gobierno en funciones Ejecutivas, un Supremo Congreso en funciones Legislativas y un Supremo Tribunal Justicia.
Para los que somos orgullosamente oriundos de este hermoso Municipio de “Ario de Rosales”, un pueblo que se encuentra ubicado en la serranía, entre Oyameles, Encinos y Pinos de este hermoso Estado de Michoacán de Ocampo. Una tierra fértil que ha contribuido al motor de la fruticultura del País, lugar donde mujeres y hombres trabajadores han forjado generaciones de productores del campo. Testigo fiel de un importante acontecimiento que marcó la historia de la procuración de justicia en nuestra Nación.
Denominado así en honor a Víctor Rosales a quien el Congreso Constituyente lo reconoció como uno de los “Trece Héroes de la Patria” y cuyo nombre se encuentra plasmado con letras de oro en la Máxima Tribuna de este País, la “Cámara de Diputados del Congreso de la Unión”.
El martes 07 de marzo de 1815, se instaló en Ario de Rosales, el Primer Supremo Tribunal de Justicia para la América Mexicana, según lo ordenaba el Decreto Constitucional de 1814 cuyo contenido fue la Constitución de Apatzingán.
Fue en este Municipio, donde se plasmaron las bases sólidas del sistema de justicia que rige a nuestro Estado Mexicano, donde Don José María Morelos y Pavón, Siervo de la Nación, culminó su anhelo de salvar a los humildes de la esclavitud, de la explotación y de la injusticia.
Lugar donde los ideales de nuestros libertadores Hidalgo y Morelos, fueron acuñados para forjar la utopía impensable de un pueblo igualitario.
A 207 años de aquel gran acontecimiento, siguen más que vivos los ideales sustanciales del ordenamiento social que Morelos planteó. México y Michoacán sin duda deben tener viva la esencia formadora de instituciones que garanticen la igualdad entre sus gobernados.
Es por ello que, los que conformamos la sociedad actual, estamos obligados a defender este legado que se concibió con sangre y esfuerzo por nuestros libertadores. Debemos luchar todos los días por tener un País con leyes e instituciones fuertes, que defienda los derechos de todos por igual.
En reconocimiento a lo antes señalado en sesión del Congreso del Estado de Michoacán, propuse ante el Pleno que, en reconocimiento de esta importante fecha, sea plasmada una distinción en forma de Presea con el nombre de “Primer Supremo Tribunal de Justicia Ario 1815”, para ser otorgada por el Congreso del Estado a personas, instituciones u organizaciones, que se hayan distinguido por sus méritos paradigmáticos en pro de defender, cultivar, forjar, establecer, impartir, difundir, fomentar la justicia, o bien, que por su trayectoria profesional o social, se hayan destacado en cualquier ámbito de la justicia en beneficio del Municipio de Ario de Rosales, de la Entidad o de la Nación.
Quiero hacer un paréntesis y agradecer el apoyo de mis compañeros legisladores por aprobar esta propuesta que realza aún más esta fecha tan importante para el País “Gracias de todo corazón”.
Para el Honorable Congreso del Estado de Michoacán, los que conformamos esta LXXV Legislatura, nos sentimos congratulados al entregar esta primera presea “Primer Supremo Tribunal de Justicia Ario 1815” al distinguido abogado Dr. Jorge Álvarez Banderas, por su excelente trayectoria en el ámbito jurídico “Muchas Felicidades”.
Con motivo de ello, quiero traer a la memoria de todos ustedes un párrafo de la carta dirigida por generalísimo Morelos a Andrés Quintana Roo, y dice así; “Quiero que tenga el pueblo un gobierno dimanado del pueblo y sostenido por el pueblo, quiero que hagamos la declaración que no hay otra nobleza que: la virtud, el saber, el patriotismo y la caridad.
Que todos somos iguales pues del mismo origen procedemos, que no haya privilegios ni abolengos, que no es racional ni humano que haya esclavos pues el color de la cara no cambia el del corazón ni el del pensamiento, que se eduque a los hijos del labrador y barretero como a los del más rico hacendado, que todo el que se queje con justicia tenga un Tribunal que lo ampare y defienda contra el fuerte y el arbitrario”.
Morelos se dio cuenta de que el México futuro necesitaba una institución que brindara orden y justicia. Y hoy recae en todos los que nos encontramos aquí, es nuestro deber resguardar los ideales que fueron enmarcados en este gran Municipio. Que la justicia emana y es del pueblo, que rige a las autoridades y a la sociedad.
Muchas felicidades a mis paisanos Arienses, a los Michoacanos y a los Mexicanos un pueblo que se encuentra ubicado en la serranía, entre Oyameles, Encinos y Pinos de este hermoso Estado de Michoacán de Ocampo.
Una tierra fértil que ha contribuido al motor de la fruticultura del País, lugar donde hombres y mujeres trabajadoras han forjado generaciones de productores del campo. Testigo fiel de un importante acontecimiento que marcó la historia de la procuración de justicia en nuestra Nación.
Para culminar cito las palabras del Magistrado Jorge Mendoza Álvarez, Presidente del Supremo Tribunal de Justicia de Michoacán, en el año de 1976, y con marco del 161 aniversario de la instalación del Primer Supremo Tribunal de Justicia de la Nación, con gran acierto señalaba, “Ario de Rosales debe conservar para siempre el monumento histórico de la Casa de la Justicia”.
Hoy con gran orgullo decimos: “Ario de Rosales, serás por siempre la cuna de nuestro Poder Judicial de la Federación del “Primer Supremo Tribunal de Justicia Ario 1815”.
