Acueducto Online | Columna
1.- Más allá de toda la discusión entre líderes de diputados locales y de trabajadores sindicalizados del Congreso del Estado de Michoacán, para tratar de situar orden laboral en los segundos, en todos los sentidos, el ente congresista requiere de una verdadera reingeniería administrativa de un despacho externo, en todas las áreas, en todas.
2.- Si se realizara un verdadero diagnóstico acerca del funcionamiento del poder legislativo michoacano, seguramente tendría como resultado una creciente obesidad, tanto en el personal sindicalizado y en el llamado de confianza, lo cual traería como propuesta, evidentemente su adelgazamiento de su estructura orgánica.
3.- Y no solo eso, sino que se exhibiría una serie de irregularidades que van desde temas de adquisición y distribución de equipo materiales, y en ello incluido el robo “hormiga”, hasta una serie de sospechosas erogaciones, más allá de los famosos viáticos. Como esa reingeniería suena inviable, sigan escupiendo hacia arriba.
