Morelia/Acueducto.- Desde el primer año de gobierno de Andrés Manuel López Obrador, se rompió el record de violencia, con 34,582 homicidios dolosos, de acuerdo con el Secretariado Ejecutivo del Sistema Nacional de Seguridad Pública.
Por lo que familiares de personas que han sido víctimas de la violencia que azota el país, se han reunido para volver a marchar desde Cuernavaca a Palacio Nacional, para exigir un alto a la violencia.
“No estamos en contra de el presidente, ni en contra de la 4T, nuestro enemigo es la violencia”, expresó el activista Javier Sicilia, un hombre dedicado a la literatura y el periodismo, hasta el 28 de marzo del 2011, cuando encontraron a su hijo de 24 años, en un vehículo junto con otras seis víctimas en Temixco, Morelos.
“Es mi último poema, no puedo escribir más poesía”, fueron las palabras del activista frente a la Ofrenda de las Víctimas que instaló en el centro de Cuernavaca, lugar donde partió el primer contingente hacía el Zócalo capitalino para exigir a Felipe Calderón, detener la guerra contra el crimen organizado.
Por lo que ahora, hombro con hombro, marcha junto con los integrantes de la familia LeBarón, quien recientemente se vieron afectados con el asesinato de nueve miembros de su familia en Bavispe, Sonora.
Esta nueva caminata por la Paz, tiene el propósito de recordarle al nuevo gobierno, el infierno que padecemos con la violencia que existe desde hace años.
