Morelia. Mich. | Acueducto.- Se ha registrado un nuevo caso de brutalidad policiaca, en esta ocasión en Bogotá Colombia. Se trata de Javier Ordónez, un abogado colombiano de 46 años, padre de dos hijos que murió tras la gopiza y las múltiples descargas eléctricas que recibió por parte de dos policías.
¿El motivo? Ordóñez se encontraba fuera de su domicilio ingiriendo bebidas alcohólicas. Pese a que tanto el detenido, como sus familiares y amigos les pedían a los uniformados que pararan, estos hicieron caso omiso y continuaron proporcionándole descargas con la pistola de electrochoques.
Tras el forcejeo, Ordóñez fue llevado a una estación policíaca y posteriormente a un hospital donde finalmente falleció.
El atroz acto llevó a la comunidad colombiana a manifestar su descontento con el actuar de los policías -quienes ya fueron destituidos del cargo- sin embargo, los disturbios han alcanzado gran magnitud, dejando un saldo de siete muertos y cientos heridos de bala.
La alcaldesa de Bogotá, Claudia López, refiere que “Hubo uso indiscriminado de armas de fuego”, así mismo pidió una “reestructuración profunda y seria al interior de la policía”.
