Morelia, Mich. | Acueducto Noticias/ Carlos Tapia.- Brock Purdy, el quarterback que emergió de las sombras del Draft 2022 como el último jugador seleccionado, ha demostrado que no todo lo que reluce es oro, pero puede brillar con luz propia. Originario de Iowa State, este jugador pasó de ser considerado “Mr. Irrelevant” a convertirse en la fuerza motriz de una ofensiva formidable en la NFL, presentando un caso intrigante que podría ser la clave para el ansiado sexto campeonato de los 49ers de San Francisco.
Inicialmente fuera del radar mediático, Purdy se volvió el foco de atención cuando las lesiones afectaron a los quarterbacks titulares, Jimmy Garoppolo y Trey Lance. Ante esta situación, el entrenador Kyle Shanahan tomó la audaz decisión de introducir al número 262 del Draft al terreno de juego.Su debut como titular frente a los Buccaneers de Tampa Bay resultó en una victoria, destacando el irónico enfrentamiento con Tom Brady, quien también fue seleccionado en sexta ronda y se retiró como una leyenda.
Purdy encajó perfectamente en el esquema de los 49ers, ganándose la confianza de Shanahan y consolidándose como el líder indiscutible del equipo. El “fenómeno Purdy” alcanzó su punto máximo en la final de la Conferencia Nacional de la temporada pasada, donde una lesión lo marginó y contribuyó a una derrota devastadora para San Francisco, privándolos del Super Bowl.
Sin embargo, este joven talento ha solidificado su posición como el quarterback titular de los 49ers. Hoy, Mr. Irrelevant se encuentra a un paso de romper una sequía de 29 años sin ganar el Super Bowl, emergiendo como el quarterback franquicia que los 49ers no sabían que necesitaban.
La historia de Purdy es un testimonio de cómo el talento puede surgir de las circunstancias menos esperadas, y su impacto en la recta final del Super Bowl puede ser la narrativa más sorprendente de la temporada.
