Morelia, Mich. | Acueducto Online.- El presidente Andrés Manuel López Obrador dijo que en 2018, cuando asumió el cargo, consideró que su gobierno creara una nueva Constitución para asentar así la cuarta transformación del país, como lo fue con en los años 1824, 1857 y 1917; sin embargo, reconoció que esto sería muy difícil y se perdería mucho tiempo, por lo que decidió que enviaría “reformas constitucionales de fondo”.
En conferencia de prensa matutina, López Obrador dijo que por ese motivo, una vez que se discuta la reforma electoral, ya no enviará nuevas iniciativas.
“Ya no hay nada… Estoy muy contento con lo que hemos hecho”, destacó.
“Cuando se habla de las transformaciones, las tres grandes transformaciones han llevado a tres constituciones federales: después de la Independencia fue la Constitución de 1824; después del movimiento de Reforma fue la Constitución de 1857, y después de la Revolución la Constitución de 1917”, comentó.
Y prosiguió: “Cuando nosotros llegamos y hablamos de la cuarta transformación sí pensamos, analizamos, la posibilidad de una Constitución nueva, pero también sopesamos de que iba a ser muy complicado y que íbamos a perder mucho tiempo, que teníamos que buscar cambiar lo esencial”.
El presidente dijo que esto “no fue tarea fácil” debido a que durante “todo el periodo neoliberal (…) todas las reformas a la Constitución se hicieron para legalizar el lucro, el robo, el saqueo y todas en favor de minorías, todas o casi todas en contra del pueblo”.
Por ello, dijo, su gobierno decidió no crear una nueva Constitución, “sino hacer reformas constitucionales de fondo”.
Luego, las destacó: “[Se logró] que quien esté en el gobierno ya no van a poder quitar la pensión a los adultos mayores; no van a poder quitar la pensión a personas con discapacidad, no van a poder quitar las becas para estudiantes de familias pobres”.
“Se logró de que el presidente no tenga fuero y que pueda ser juzgado por cualquier delito como cualquier otro ciudadano; que la corrupción sea delito grave; que el fraude sea delito grave; que la defraudación fiscal sea delito grave; que quede prohibida la condonación de impuestos”, explicó.
Enfatizó la creación de la Guardia Nacional y que la Secretaría de la Defensa Nacional y la Secretaría de Marina puedan participar en tareas de seguridad pública, siendo esta la más reciente.
También se consiguió, dijo, que la Comisión Federal de Electricidad tenga trato igualitario que el que “le daban por ley a Iberdrola”, y enfatizó con sorpresa: “Una empresa extranjera tratada mejor que una empresa pública [mexicana]”.
“Ya todo eso ha cambiado… ¿Qué nos queda?, la parte electoral, que se respeten las elecciones, que se respete la voluntad del pueblo, que se haya elecciones limpias, libres… Entonces ya no más [reformas]”, concluyó.
