Morelia, Mich. | Acueducto Noticias/Carlos Tapia.- El Festival Internacional de Cine de Morelia (FICM), en su 22ª edición, fue testigo de una de las jornadas más emocionantes de su historia reciente, destacando a «Sujo» de Astrid Rondero y Fernanda Valadez como la obra cumbre del certamen. El largometraje fue premiado con tres galardones clave: Mejor Guion de Largometraje Mexicano de Ficción , Ojo a Mejor Dirección de Largometraje Mexicano de Ficción , y Ojo a Mejor Largometraje Mexicano, consolidando su éxito en una edición marcada por su diversidad y apuesta por voces originales del cine nacional.
«Sujo»:
Dirigida por Rondero y Valadez, «Sujo» aborda las complejidades del México contemporáneo, explorando temas de pertenencia, lucha y redención en un contexto de profunda vulnerabilidad humana. Con una narrativa envolvente y una estética visual cautivadora, la película se convirtió en la favorita tanto del jurado como del público. La dirección de Rondero y Valadez fue destacada por su capacidad de fusionar el drama social con una atmósfera íntima que invita al espectador a una experiencia sensorial y emocional. “Este reconocimiento es un testimonio del poder de contar historias auténticas y necesarias en un México lleno de matices”, comentó Valadez al recibir el galardón.
Además de la Selección Oficial, la sección Impulso Morelia 10 brindó una plataforma invaluable para proyectos en desarrollo, resaltando la importancia de fomentar el cine independiente y emergente. La reserva de Pablo Pérez Montalvín se llevó un paquete de postproducción valorado en 167 mil pesos, ofrecido por Caffeine Post, mientras que Si No Habemos Cómo Iluminar la Noche de Kim Torres recibió el apoyo de los Estudios Fletronia para mezcla de sonido y corrección de color. , asegurando su continuidad hacia la postproducción.
Uno de los premios más significativos de Impulso Morelia fue el Premio Churubusco , consistente en un millón de pesos en servicios de postproducción, otorgado a Reportaje de Nicolás Gutiérrez de Navarra. Este reconocimiento, junto al Premio José María Riba de 250 mil pesos a La reserva , reafirma la apuesta del FICM por impulsar obras que buscan representar la realidad mexicana desde perspectivas auténticas y novedosas.
Los premios a los cortometrajes mexicanos fueron iguales de relevantes, destacando a La Mancha Negra de Yareni Velázquez como el Mejor Cortometraje de Animación Mexicano , elogiado por su riqueza visual y la profundidad de su narrativa. En la sección de documental, Buscando un burro de Juan Vicente Manrique se alzó con el Ojo a Mejor Cortometraje Documental Mexicano, con una historia que resuena por su sensibilidad hacia la vida rural en México.
Asimismo, la Asociación de Mujeres en Cine y Televisión entregó su premio a Formas de atravesar un territorio de Gabriela Domínguez Ruvalcaba, un homenaje visual y poético a las mujeres que han tejido su vida en las montañas y campos de México. Este reconocimiento va desde una perspectiva de género, honrando a directores que construyen puentes entre el cine y la identidad femenina.
El Jurado del 22º FICM este año incluyó a figuras como el director Alexander Payne, la actriz Liv Tyler y la cineasta Ira Sachs, quienes juntos enfrentaron el reto de evaluar más de 93 obras que compitieron en el festival. Según declaraciones de Payne, el nivel de calidad cinematográfica fue “sorprendente y desafiante, una muestra del talento y compromiso del cine mexicano”. La presencia de un jurado internacional de este calibre reafirma la reputación del FICM como un espacio que promueve y proyecta el cine mexicano al mundo.
La 22ª edición del FICM no solo dejó un legado de grandes películas, sino que también
Con cada proyección y premiación, el FICM sigue siendo un faro que ilumina el camino para las futuras generaciones.