Si Zapata viviera…

Imagen: Héctor Tapia
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Morelia/Héctor Tapia

Llegaron frente a Palacio de Gobierno, al corazón de la ciudad de la cantera rosa. Se podía observar dos grupos mayoritarios, uno de jóvenes y uno de viejitos, o adultos mayores, personas de la tercera edad, “¡si Zapata viviera, qué chinga les metiera!”, gritaban con igual fuerza ambos grupos.

Las banderas de la Nación Purépecha Zapatista ondeaban a su vez durante la movilización; al fondo, colgada de los barrotes de la Catedral, una lona del Consejo Consultivo de Organizaciones Campesinas de Michoacán (COCOCAM).

El reclamo era simple, contundente: liberación de recursos para el campo, para el campo donde se encuentran los grupos de campesinos indígenas. Remarcan la exigencia de la solución a los problemas del campo; ese problema histórico al cual se refieren en los discursos y que se vuelve el punto común en las referencias de los políticos: “daremos mayor atención al campo”. La exigencia, de todas formas, sigue siendo la misma.

El reclamo incluye una imagen usada en la propaganda por el presidente Enrique Peña Nieto, le agregan un letrero, usan su propia imagen para recriminarle al mandatario mexicano: “queremos ver el compromiso”.

Llegaron en varios autobuses, procedentes de distintas partes del estado, explican que vienen del oriente del estado, también de la región purépecha.

Conforme avanzó la exigencia los manifestantes mayores se sentaron en el suelo; las viejecitas, con reboso rodeando su torso, desde el cuello, pusieron los petates en el suelo, se acomodaron frente a la puerta del palacio, con sus cartulinas en la mano.

Eran alrededor de 200 manifestantes bajo el sol del medio día. Y aunque algunos de ellos se guardaban del inclemente sol en cualquier rincón con sombra, las señoras, animosas, seguían gritando consignas en el alta voz. Intercalaban sus participaciones con los mismos jóvenes.

“¡Zapata vive!…. ¡la lucha sigue!”, gritaban, y de forma inmediata el resto contestaba repitiendo la consigna.

San Ramón, Maravatío, Uripitío, eran sólo algunos de los lugares que se mostraban en las pancartas que portaban los manifestantes.

Los inconformes campesinos bloquearon la circulación durante su protesta, la cual se extendió mientras una comisión fue atendida por personal de la secretaría de gobierno del estado.