“¡Pónganse a trabajar, pinches…!” (Fotogalería)

Imagen: Alan Ortega
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Morelia/Alan Ortega

Bajo una lona, desde donde lanzaban consignas en apoyo a las 43 desparecidos de Ayotzinapa, aunque su principal demanda era el rechaza a la tarjetización de sus pagos, maestros pertenecientes a la Zona D-146 de Indaparapeo, se cubrían del sol, al igual que los fotógrafos que se hacían presentes para tomar las gráficas del bloqueo.

En esta ocasión los profesores se encontraban en el lugar para protestar en contra del cambio en la forma de pago a las afueras de Banamex, ubicado en el número 63 sobre la avenida Madero, banco que  lleva el control de los pagos de nómina del magisterio desde hace aproximadamente un año. De la misma forma lo hicieron con el resto de las sucursales en todo el estado.

Desde las 8 de la mañana más de 200 maestros se apostaron sobre la banqueta, afuera del banco; profesores recién egresados de las escuelas normales del estado, realizaban sus primeras protestas como integrantes del ala magisterial democrática.

Afuera del banco se podía observar que algunos de los que asistieron a la protesta iban mejor preparados que otros, pues los de más experiencia llevaban sombrillas y banquitos, los menos no llevaban nada para hacer más pasable la protesta y por lo tanto se encontraban sentados sobre la banqueta.

Durante la protesta los maestros recibieron insultos, pues algunos de los usuarios que tenían que realizar sus trámites en el banco, se quejaban por no poderlos realizar. Insultos cómo “Ya pónganse a trabajar, pinches huevones”, se llegaron a escuchar por parte de los molestos usuarios.

Los transeúntes al pasar de manera sorpresiva tomaban la evidencia gráfica y simpatizaban con algunas palabras o haciendo sonar su claxon en el caso de los automovilistas.

El cambio en el tipo de pago a los profesores se realizaría el próximo primer día de enero del 2015, algunos docentes se encontraban ahí con la idea de que el gobierno iba a ceder y era posible conseguir una mesa de negociación.

Aseguran que éste cambio les afectaría de manera sistemática en sus finanzas pues sólo podrían disponer en dos ocasiones de su dinero y tendrían que dejar intactos 500 pesos por mes, lo cual, dicen, es muy complicado para la situación actual que se vive en México.

No están muy conformes con realizar la protesta, dicen que es mejor dar clases, pues “surgen muchas incomodidades tales como las necesidades fisiológicas y la alimentación, aparte de estar expuestos al sol durante el día”.

En el caso de que el gobierno no diera respuesta positiva a sus demandas radicalizarían sus acciones en contra del banco y el mismo gobierno del estado.