Ismael Herrera/Opinión
Después de desarrollada la jornada número uno dentro del Clausura 2019 del futbol mexicano, las cosas para Monarcas no se ven nada claras.
Los presagios previos al arranque del campeonato se cumplieron, luego de la salida de 4 jugadores, dos de ellos clave, y la llegada de 2 refuerzos que no convencen de inicio a muchos.
Lo anterior reforzado con la irregular actuación del torneo anterior, que no les permitió calificar, y que confirmó que no está a la altura para buscar un título, agrava la situación.
La política del equipo seguida en los últimos años, y continúa conformando cuadros a de medio nivel, «haber si pega», y el negocio que está en las contrataciones de bajo perfil, que buscan den un «chispazo» para venderlos por encima de lo comprado.
Aunado a esto se cuenta con una afición demasiado «noble», que realiza buenas entradas y consume ampliamente en el estadio, pues no les preocupa pues sus finanzas están sanas y con buenas ganancias por lo que no les urge invertir en jugadores de alto nivel.
Con esto como antecedente y con la actuación vista en el primer juego, y primera derrota ante Toluca, se prevé un mal torneo
Monarcas mostró una defensiva débil, y fácil de desequilibrar, que mantiene su base en Gabriel Achillier, jugador que si bien cumple, no se puede catalogar como un líder de la zaga, pues, de la misma manera no cuenta con un bloque defensivo que lo respalde, y que se debilitó más con la salida de Guzmán.
El medio campo igualmente es intermitente, pues no hay un solo hombre que se eche a la espalda el equipo, pues la zona creativa no es constante con Millar, al igual como lo era en su momento con Valdés, este último que por cierto no fue sustituido hasta el momento por otro jugador de ese nivel y con esa funcionalidad. En la contención, Rocha cumple pero no tiene la salida suficiente para aportar al frente que es otro tema el ataque.
Precisamente la ofensiva michoacana es de las más cuestionadas, pues desde la salida de Ruidiaz, no hay quien llene ese hueco, y el trabajo al frente es muy limitado.
En cuanto a la banca hay pocas opciones de algún relevo que dé un revulsivo al equipo.
La esperanza resta en algún refuerzo extranjero que pueda llegar, lo cual tienen como límite hasta fines de mes, pero que de propias palabras del entrenador, Roberto Hernández no hay un contacto seguro de momento.
Así las cosas habrá que esperar al desarrollo del torneo para ver la evolución del equipo, y sus reales alcances.