Morelia/Jesús Valencia Farías
El representante del Sistema Producto Tilapia de Michoacán, Héctor Javier Vidrios, sostiene que en el estado apenas se está normalizando la seguridad pública y de que hay la esperanza de que se consolide.
La inseguridad, acota, afectó mucho a los productores, sobre todo para comercializar la tilapia, porque muchos compradores del país ya no querían ni venir a Michoacán.
“Afortunadamente actualmente las cosas se están normalizando y tenemos pues esperanza de que se solucione esa situación”, precisa.
Acueductoonline: ¿Siguen siendo objeto de extorsión…?.
Héctor Javier Vidrios: Para ser honesto, que yo tenga conocimiento de algún productor que este siendo afectado, ahora, no.
Al hablar del caso de las autodefensas, inicia diciendo que es un tema polémico, pero termina reconociendo que sin su surgimiento que atrajo la atención nacional, Michoacán no hubiese sido tomando en cuenta.
“Fue un paso importante, desafortunadamente, en este momento desconozco la situación, si se han mezclado con la delincuencia y quienes integran esos grupos”, señala.
La importancia de la tilapia
La oferta comercial de productos ricos en proteínas para el consumo de los michoacanos tiene una oportunidad en las tilapias que se producen en distintas partes de la entidad, algunas de las variedades como la mojarra, el bagre o el huachinango, en su mayoría son más económicas que la carne roja, con la ventaja de que tienen un mayor grado de calidad e inocuidad que la producción de carnes porcinas o de res.
Michoacán cuenta con una gran variedad de climas aptos para el cultivo de especies como tilapia, bagre, trucha, langostino y carpa; la tilapia y la carpa representan el 80 por ciento de la producción total, siendo la primera de gran impacto social.
La trucha y el bagre cultivado representan el 20 por ciento y se destinan prácticamente al consumo interno según datos de la Secretaría de Agricultura, Ganadería, Desarrollo Rural, Pesca y Alimentación (Sagarpa).
