Morelia, Mich. | Acueducto Noticias / Irene Valdivia.- Lucero Ríos Ávalos es una cocinera tradicional, originaria de la propia capital michoacana, lleva toda una vida en la gastronomía.
“Toda la vida hemos trabajado en esto, desde que estaban nuestros padres, ellos fueron los que empezaron con este negocio. Y nosotros fuimos siguiéndolo como parte de la cultura y de la gastronomía moreliana”.
Actualmente representa a la Unión de Trabajadores, cuyos integrantes cada domingo comparten los platillos de 15 familias, que laboran a un costado del templo Mater Dolorosa.
Ellos serán anfitriones del festival del tamal y buñuelo, en la misma locación, precisamente este 7 de septiembre.
Una enseñanza histórica
Acueducto.- ¿Cómo fue aprender y comenzar en la cocina tradicional?
Desde pequeña, mis papás, mi madre, se dedicaban a ello. Fuimos 16 hermanos, y todos fuimos aprendiendo de ahí cómo iba cocinando. Nos fue motivando, nos fue emocionando porque nos llamaba la atención y afortunadamente, ahorita continuamos con ese legado y ahora con el apoyo más del ayuntamiento y de la ciudadanía, porque más que nada, si no estuviera la ciudadanía que nos consumieran los platillos, pues no seguiríamos.
Acueducto.- ¿A usted siempre le gustó la cocina o fue un gusto adquirido eventualmente?
Siempre nos ha gustado la cocina y también los sabores, aunque también estudiamos, tenemos nuestra carrera como profesionistas cada uno de nosotros, pero nunca sin dejar al lado lo que son los antojitos mexicanos.
Acueducto.- ¿Cree que la costumbre de comer comida tradicional se está perdiendo o que se está ganando peso?
Pienso que se está ganando peso, porque la difusión de todos los medios de comunicación, ustedes que nos apoyan, a que la ciudadanía se dé cuenta que existimos todavía y que las autoridades también y los amigos, los compañeros. Están haciendo que esta gastronomía cada día crezca más y que podamos disfrutarla más que algún otro platillo que no es mexicano.
Desde pequeños
Acueducto.- ¿En qué momento se convierte en un plan de vida para usted dedicarse a esto?
Desde siempre, creo que desde niños fue un impulso para seguir estudiando, para prepararnos. Ahora, pues ya todos tenemos familia, hijos y nietos. Entonces es parte fundamental para nuestra economía personal.
Acueducto.- ¿Y cómo comienzan a trabajar junto al templo de Mater Dolorosa?
Comenzamos desde 1985, ya estaba mi mamá trabajando aquí en el templo de Mater Dolorosa.
Empezamos por las misas que se dan los fines de semana. Posteriormente, cuando fue la reubicación de los puestos ambulantes que hubo en del centro, el Ayuntamiento nos ayudó a que pudiéramos estar aquí en el templo de Mater Dolorosa, claro, con un permiso, y con esa tolerancia para continuar trabajando.
Entre olores y sabores
Acueducto.- ¿Qué es lo que más disfruta usted en la cocina?
Los olores, los sabores, el poder transmitir nuestros sentidos, nuestras emociones en esos platillos, porque al probarlos se siente todo ese cariño, esa pasión, esa higiene con la que lo hacemos y no lo hacemos, aparte de que nos da una economía, lo hacemos también con ese gusto, esa pasión con la que nos enseñaron nuestros padres.
Acueducto.- ¿Cuál diría usted que es su fuerte en la cocina?
Pues todo, sería las enchiladas, los tacos, los pambazos, tamales, el pozole, los buñuelos, cada uno de los platillos los sabemos preparar.
Acueducto.- ¿Cómo ha sido la recepción del público en su establecimiento? ¿Ha bajado o cómo ha ido, por ejemplo, con la pandemia?
Desafortunadamente, cuando fue la pandemia, el Ayuntamiento y nosotros también por higiene y por seguridad también de nosotros, de nuestras familias, tuvimos que suspender durante algunos domingos, porque nosotros estamos todos los domingos todo el año. Entonces tuvimos que suspenderlo durante la fuerte pandemia, nos afectó, claro, como a toda la ciudadanía y a toda la gente, pero pues afortunadamente volvimos a retomarlo poco a poco con las medidas de higiene que nos pedían y que nosotros también para protección y cuidado también de nosotros y de las personas que nos consumían.
En plena recuperación
Acueducto.- ¿Dirían que ya está como recuperado o sigue todavía el proceso de recuperación?
Pues creo que todavía se está terminando de recuperar, pero ya estamos mucho más avanzados. Como en todos los negocios, ya estamos mucho más avanzados. Ya empieza a venir nuevamente la gente normal los fines de semana a misa, y a consumirnos a nosotros.
Acueducto.- Y finalmente, ¿Qué expectativas tiene para el festival del tamal y el buñuelo?
El 7 y 8 de septiembre aquí afuera del templo de Mater Dolorosa, sobre la calle Jesús Ortega número 60, en el Colonia Centro. Esperamos que toda la ciudadanía, todos los morelianos, michoacanos o fuera del Estado, nos acompañen a degustar estos platillos, que se den cuenta que la gastronomía es muy resaltada aquí en el en el municipio y en el Estado. Esperamos que nos acompañen, que disfruten de un ambiente familiar, que disfruten de los eventos culturales que también nos va a estar acompañando, y cómo no, que degusten estos platillos mexicanos 100% morelianos que son riquísimos.
