Morelia/Héctor Tapia
La concentración de trabajadores sindicalizados, tanto de la Coordinadora Nacional de Trabajadores de la Educación (CNTE), del Sindicato de Trabajadores al Servicio del Poder Ejecutivo (STASPE), principalmente, cubrió gran parte de la avenida Madero, frente a la Plaza de Armas.
La muchedumbre se hizo más, contando al plantón de sus contrarios que lleva más de un cinco semanas de los antorchistas, estos apostados frente a Palacio de Gobierno.
Aunque se habían enfrentado la CNTE con los antorchistas hace cinco semanas, ahora se ignoraron.
Esto no impidió la concentración masiva de empleados sindicalizados que integran el Frente Cívico Social. Estos exigen la respuesta a las demandas que, aunque presentadas de forma individual, juntaron sus quejas a las que no se les han dado solución.
“Queremos acciones y respuestas, no charlas de café”, espetó Antonio Ferreyra, líder del STASPE, durante la manifestación.
Montaron un templete frente a los portales, desde donde hicieron un mitin político donde, bajo el sol de mediodía, amenazaron con ir haciendo paros escalonados, de 24 a 78 horas, hasta que no les dieran respuesta favorable a sus respectivas demandas.
Desde el templete se podía observar a los trabajadores integrados en el Frente cubriéndose con amplios sombreros de paja y con sombrillas.
El intensó calor no amainó el ánimo de seguir gritando sus consignas.
El líder del STASPE dio apenas un par de días para recibir respuesta clara a las demandas de los sindicalizados que representa, y que tienen que ver con el incremento salarial correspondiente al año pasado y que sigue en proceso de negociación.
Los automovilistas, como cada manifestación que hay en el centro de la ciudad, se quejaron por los inconvenientes y pérdidas que les causan. Pero saben, tal como lo han anunciado los propios líderes integrantes del Frente Cívico Social en este caso, que no será la última. Aún hay mucho por venir. Está anunciado.
