“Cuando un hombre traiciona su palabra, no vale nada”. Ezra Pound (1885–1972) Poeta estadounidense.
Con usted, hasta la ignominia señor presidente López Obrador, parece decir el gobernador de Michoacán, Alfredo Ramírez Bedolla con su férrea defensa al incumplimiento del inquilino de Palacio Nacional para federalizar la nómina magisterial.
Prefiere mentir que desempeñar con dignidad la enorme responsabilidad que implica ser servidor público.
Ante la próxima y última visita que realizará López Obrador a Michoacán y esta vez acompañado de la presidenta electa Claudia Sheinbaum Pardo, Ramírez Bedolla insistió el pasado martes en defender que “el presidente nos cumplió, tanto nos cumplió que ha estado a tiempo y en forma el salario de los maestros, de las maestras, sus bonos, sus prestaciones como nunca antes”.
Nada más que el compromiso es otro. Recordemos un par de ejemplos:
- El 5 de abril de 2019, López Obrador dijo: “aquí en Michoacán se los digo, estamos dispuestos, se lo he comentado al gobernador (Silvano Aureoles Conejo), y en la mejor disposición, para que se federalice todo el sistema educativo. ¿Qué significa eso? Para detallarlo, significa que la Federación se hace cargo de todo lo que tiene que ver con la educación de Michoacán. Ya de esta manera funciona en la Ciudad de México”.
- El 9 de octubre del 2021, durante la presentación del Plan de Apoyo a Michoacán, el presidente de México ratificó el compromiso: “hemos convenido con Alfredo de que se va a tener una sola nómina y que se va a federalizar toda la nómina de los maestros michoacanos, y ya no se va a enviar el dinero… ya no va a haber intermediarios, se le va a entregar de manera directa a la maestra, al maestro su salario… ese es el acuerdo que estamos tomando”. Remató: “Y nos hacemos cargo de que los adeudos los va a absorber el gobierno federal, para que nos pongamos al corriente y nunca más le vuelvan a faltar los sueldos a los maestros de Michoacán. Ese es el compromiso”.
La importancia de federalizar la nómina del magisterio michoacano radica en evitar que el envío de recursos extraordinarios dependa de la voluntad del mandatario federal en turno, condición que inició con los gobiernos de los perredistas, hoy morenistas, Lázaro Cárdenas Batel y Leonel Godoy Rangel.
López Obrador dejará la Presidencia de México sin cumplir, ni siquiera ha firmado un nuevo acuerdo para que, por lo menos, la Federación ponga el 50 por ciento del total de la nómina, ha mantenido una aportación obligada del 34.5 por ciento del total.
Conste, desde el 25 de julio de 2022 a través de un comunicado, Ramírez Bedolla reconoció implícitamente que no se federalizaría la nómina magisterial al informar que propuso ante el entonces secretario de Gobernación, Adán Augusto López Hernández “modificar el porcentaje de pago de la nómina magisterial para quedar en 65.4 por ciento la aportación federal (6 mil 592 millones de pesos anuales) y 34.5 por ciento la estatal (3 mil 487 millones al año”. Desde entonces sabe del incumplimiento y pese a ello insiste en mentir.
A partir del 1 de octubre, la decisión de apoyar quedará en manos de Sheinbaum Pardo. Estará vigente el riesgo de que se repita la última crisis que padeció Michoacán con el magisterio por la disputa que desarrollaron López Obrador y Aureoles Conejo.
Si Ramírez Bedolla no es bien visto por Claudia Sheinbaum, como se percibe que no lo es, puede decidir ponerlo contra las cuerdas y bastará con dejar de mandar el recurso extraordinario para la nómina magisterial.
El único funcionario que ha dicho la verdad pese a llevarle la contra a los ejecutivos federal y estatal, es el secretario de Finanzas, Luis Navarro García quien en reiteradas ocasiones ha señalado que no se ha logrado la federalización de la nómina, ni se logrará: “eso no va a pasar, el que los trabajadores pasen al gobierno federal y les paguen, no va a pasar. La Federalización de la nómina, yo siempre lo he dicho, el esquema que se planteó de inicio, siempre dije que iba a ser inviable”.
Argumentó además que, “lo que busca el gobernador y yo también es que se deje documentado en el convenio que ya se lleve el 50-50 y no nos tengamos que esperar hasta el final del año, a ver si nos van a poder ayudar con ese ese copete, copetote. Si logramos el 50-50 antes de que el presidente se vaya para mí va a ser un gran logro”.
No lo lograron y por ello prevalece un enorme riesgo para las finanzas estatales, que quedan ahora al contentillo de Sheinbaum Pardo.
Por lo pronto, lo claro es que López Obrador incumplió y Ramírez Bedolla opta por mentir y arrastrar la dignidad defendiendo lo indefendible, fallándole a los ciudadanos y doblegándose al tabasqueño, hasta la ignominia.
Lo grave de todo esto, es que, si el que cobra como gobernador de Michoacán miente ante la evidente, ¿cómo estará el resto de su administración?
Con la esperanza de que haya una próxima vez… me despido, gracias.