Morelia, Mich. I Asaid Castro/ACG. – Gobierno, ambulantes y el Mercado de Dulces y Artesanías ¿Riesgo en la pérdida de tradiciones?
Aunque es bien sabido que los juguetes tradicionales contrastados con la tecnología generan una brecha entre éstos y los niños, la situación ante los comerciantes del mercado de dulces resulta preocupante por la pérdida de tradiciones.
«Los niños ya no quieren esto, les gusta los juguetes electrónicos o las tablets. Como padres hemos perdido la cultura por nuestros juguetes y es más fácil darle el teléfono a los niños para mantenerlos entretenidos, nuestros productos ya son mas un souvenir»
Así lo comento Bianca C, comerciante quien lleva más de 30 años de trayectoria en el ámbito de la venta de artesanías.
Aunque el miedo de los mismos no se queda solo en la perdida de la tradición, si no también en que al no ser productos de primera necesidad no puedan solventar sus gastos en el futuro, comentan que los permisos que da el gobierno a los vendedores ambulantes los terminan afectado de una u otra forma.
«Se que en casa hay bocas que alimentar, no estoy en contra de ellos, pero quien da los permisos también recibe su tajada y nos friega a nosotros que pagamos impuestos, hacienda, luz y renta» en palabras de Tomasa Rivera, comerciante.
Así, reportan que aunque vayan pocos los días del año, han tenido muy pocas ventas, siendo un 70 por ciento menos porque lo que encuentran en el mercado, lo encuentran con comerciantes ambulantes y ya no hay necesidad de visitar el mercado.
Priorizan, que para la niñez es importante seguir fomentando este tipo de juegos para estimular su mente ya que todos sus juguetes son didácticos e invitan al gobierno a que los apoyen.
Como nos lo comenta Bianca, C. «Me gustaría que en la escuela fomenten la cultura del juguete tradicional, es bien importante que la Secretaría de educación se ponga las pilas y realice platicas al interior de las escuelas sobre la importancia de estos juguetes».
También es notorio, que algunos comerciantes se han tenido que modernizar para solventar sus gastos, con juguetes tradicionales pero ahora de plástico, como yoyos, trompos, flautas, entre otros.
Incluyen que a causa de que ya no muchas personas, a excepción de turistas compran sus artículos, varios compañeros han tenido que bajar la cortina y cambiar de giro.
Aunque siguen siendo productos muy buenos para los más pequeños, que aveces toman por sorpresa a los comerciantes cuando les preguntan por juguetes en especifico como muñecas de cartón, pajaritos de agua, matatena o no te enojes.
También invitan al público a no regatear los precios, que a pesar que de es comprensible la situación, nos comentan que el precio de los materiales también sube y dan sus productos, al precio más bajo que pueden, así lo comento Blanca R.
Por otro lado, otra iniciativa que le parece ideal a Lucila C, es el fomentar talleres al interior del mercado para los niños, esto para explicar el funcionamiento de los juguetes y despertar un interés en ellos, aunque para esto, es imprescindible la ayuda del gobierno.
