Morelia/Samuel Ponce Morales
Juan José Ortega Madrigal hacia alarde de las 34 órdenes de captura que le endilgaban antes de dejar la dirigencia de la Coordinadora Nacional de Trabajadores de la Educación (CNTE) en Michoacán.
Ya fuera de los reflectores, regresó a la región de Apatzingán para tomar un descanso y estar listo cuando la nueva estructura de la Sección 18 de la CNTE lo convocara, en la ya larga batalla contra la reforma educativa a nivel nacional.
El profesor pasaba sus días en reposo, disfrutando el asueto y paseando en un caballo pura sangre que le regalaron desde que estaba potrillo.
Pero la calma se rompió el sábado, cuando elementos de la Policía Ministerial del Estado arribaron a su domicilio y en cuanto lo vieron salir lo interceptaron por una orden de captura que data del 2015, cuando Ortega aún encabezaba las marchas, bloqueos y paros magisteriales en el territorio estatal.
En una rápida acción, fue subido a una camioneta blanca, sin emblemas oficiales y trasladado a la capital del estado para ser recluido en el penal David Franco Rodríguez.
La Procuraduría General de Justicia del Estado (PGJE) informó que al ex líder centista se le imputan cargos por lesiones agravadas y privación ilegal de la libertad. Así, sin más detalles.
«Cumplimenta PGJE orden de aprehensión en contra de J.J.O.M y será presentado ante Juez de Control. Por su probable intervención en los delitos de lesiones agravadas y privación ilegal de la libertad», señaló a través de la red social de Twitter.
Para las 12:00 horas, Ortega Madrigal fue ingresado al penal y puesto a disposición del juez que lo reclama.
“Fue una detención sin protocolo, arbitraria y con violaciones al procedimiento”, acusó Salvador Almanza, secretario técnico de la Sección 18 de la CNTE.
Según informes de la PGJE, el ex líder magisterial es señalado en diversos expedientes ministeriales por bloqueos en carreteras y secuestro de autobuses, entre otros disturbios escenificados por la CNTE de febrero de 2013 a febrero de 2016.
Además de una denuncia penal presentada este año por Mexicanos Primero ante la Procuraduría General de la República (PGR), por cobrar en la nómina educativa sin estar frente a grupo desde hace más de una década.
Al dejar la dirigencia sindical el pasado 28 de febrero, Ortega acusó al Gobierno federal y estatal de judicializar la lucha social en el País y en la entidad.
“No tengo miedo (de ser apresado). No hay temor porque confío en la fuerza del movimiento. Dicen que tengo 33 órdenes de aprehensión y que viene otra; serían 34. Una raya más al tigre. Esto es cotidiano para nosotros, siempre va a haber la amenaza.
“Pero no hay temor. El movimiento tiene una fuerza que cobija a sus representantes, siendo vigentes o habiéndose retirado ya de la función. Hay en todo caso preocupación por cómo han venido trabajando los temas y judicializado la protesta social”, expresó en esa ocasión.
El Gobierno de Michoacán aseguró que la captura fue consumada en apego a la ley.
«Hay momentos para actuar y hay momentos para ponderar la situación que se vive en una entidad como la nuestra. Hay valores y circunstancias que debemos permanentemente estar evaluando en pro de la estabilidad y la tranquilidad del Estado”, declaró Adrián López Solís, Secretario General de Gobierno.