Acueducto Online | Columna
1.- De hecho, el gobernador Alfredo Ramírez Bedolla se tardó, no días sino meses, en sustituir a Carolina Rangel en la titularidad de la Secretaría de Bienestar, quien no le fue fácil entender el área, menos dejar el protagonismo que supondría la catapultaría hacia alguna candidatura de Morena en el próximo proceso electoral 2024; ahora, ha sido reemplazada por alguen que entiende mejor los objetivos de la llamada cuarta transfomación en el país y, por supuesto en el estado.
2.- Al lugar de Carolina Rangel, la cual baja un escalón en el Gabinete, al irse como secretaria de la Mujer, arriba la ex líder de Morena en Michoacán, Giulianna Bugarini, ex titular de los Jóvenes en el estado y ex residente temporal en barandilla, una mujer que podría dar mucho más en la función pública si lograr la madurez política necesaria y deje atrás desde ambiguedades hasta trivialidades; sin embargo, a favor de ella, pese a lo anotado, posee mayór sensibilidad social y empatía que su antecesora en Bienestar.
3.- Giulianna Bugarini se incrusta en el Gabinete denominado bedollista como una forma de impulsarla, políticamente hablando, hacia algún cargo de elección popular, evidentemente no para la alcaldía de la capital michoacana, lo cual sería un craso error, sino enfocada a tratar de ocupar un espacio legislativo, ya sea federal o local,. Y si bien la ex dirigente morenista no tiene perfil para ser candidata al Senado y si para diputada más local que federal, no hay que descartar nada, miren a Blanca Piña…