Morelia/Redacción
El ex gobernador prísta de Michoacán, Fausto Vallejo Figueroa, negó haber pactado con el candidato perredista de su estado, Silvano Aureoles Conejo, algún tipo de alianza, aseguró que no cambiará de partido, ni de religión ni de familia, aunque escurrió el bulto en torno a su posible respaldo al aspirante del PRI Ascensión Orihuela Bárcenas, quien solo le ha hablado dos veces.
Entrevistado en el estudio de su casa por la excoordinadora de Comunicación del gobierno del estado, Guadalupe Santacruz Esquivel, ahora como reportera de la agencia Quadratín, el tres veces alcalde de Morelia calificó de infamia la versión de que el narco lo hizo ganar la gubernatura en noviembre del 2011, negó cualquier contacto con el capo Servando Gómez, del que sin embargo recibió un mensaje y un video en el que le propone pactar una tregua, y precisó que abandonó la primera magistratura del estado por enfermedad y no por los videos que vinculan a su hijo con el narcotraficante.
Vestido informalmente con un discreto pero abrigador suéter azul y como telón de fondo un nutrido librero en el que se destaca una estatuilla de Benito Juárez, el emblemático político dijo que apoyará a todos los candidatos a diputados de su partido, “menos a uno, porque no me late” (no dijo quién), en la medida en que se requiere un espíritu superior para sopesar la necesidad de que el PRI consiga la mayoría en el congreso y con ello preservar al país de un empantanamiento muy grave si prosperaran algunas contrarreformas.
Sin protagonismo, Fausto Vallejo participará en el proceso electoral, “pero cada quien con sus cuates”, e insistió en que conservará su militancia de toda la vida “aunque a algunas gentes les estorbemos”.
