Morelia/Redacción
El dirigente estatal de Movimiento Ciudadano, Daniel Moncada Sánchez exigió al gobierno del Estado aplique un verdadero Plan Antiderroche en sus finanzas, para que pueda solventar las demandas de la clase trabajadora.
Por ello, Moncada Sánchez, exigió al gobierno del Estado, cumpla con las demandas salariales del Sindicato de Trabajadores del Servicio del Poder Ejecutivo (STASPE), y permita una mejora en la calidad de vida de la clase trabajadora y sus familias.
El abogado de profesión, dejó en claro que mientras no exista un compromiso real de los gobernantes en turno, Michoacán seguirá sumergido en la pobreza y relegando los problemas de los ciudadanos.
Como ejemplo citó, que en la entidad existen un total de 300 mil jóvenes que no pueden estudiar, ni trabajar ante la falta de oportunidades, además de un millón de personas de diferentes edades que permanecen desempleadas.
Explicó que a esto se suman los 3 millones de pobres, convirtiendo al Estado en campo fértil para la delincuencia común y organizada, así como uno de los más atrasados a nivel nacional en cuestión de oportunidades educativas y profesionales.
El líder de la organización naranja, lamentó que los políticos y gobernantes continúen sumergidos en el poder, sin tomar en cuenta las grandes necesidades por las que atraviesan a diario los michoacanos, con los incrementos a la canasta básica, ya que para este 2015, Banxico pronostico hasta un 10.4 por ciento de aumento, sin tomar en cuenta que durante el 2014, subió 38.7 por ciento.
Como ejemplo, Moncada Sánchez recordó que en el 2014 el aumento de precios en la canasta básica en promedio fue de 38.7 por ciento, sobre todo por las alzas que registraron productos como el jitomate 100 por ciento; el pan blanco 36.3 por ciento; azúcar 50 por ciento, carne de res 28 por ciento; lácteos 17.8 por ciento, galletas 12 por ciento, comida para mascotas 20 por ciento y aceite 15 por ciento.
Sin embargo, dijo que esto no se refleja en el salario de los trabajadores, debido a que el aumento para este 2015, no superó el 4.2 por ciento, es decir, en comparación con los incrementos en los alimentos básicos, los mexicanos en general se encuentran con ganancias exiguas para consumir lo indispensable.