«Érase una vez Julia…»

Imagen: Constanza Orozco
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Morelia/Constanza Orozco

Con cooperación voluntaria consciente se llevó  a cabo la última función de la puesta en escena “Érase una vez Julia o lo que nos salió de los ovarios o emergieron cuerpos del agua”, una obra de teatro escrita, producida y actuada por Erandini, Alba y Yamel, actrices mexicanas egresadas de la Facultad de Bellas Artes de la Universidad Michoacana de San Nicolás de Hidalgo (UMSNH).

El día de ayer se cerró la temporada  de una obra de teatro muy atrevida y que, a pesar de la no muy basta difusión, tuvo una reacción sumamente positiva.

Una obra que invita a la reflexión sobre la situación de la mujeres en la época actual, en nuestro pasos y en nuestro estado, llenó de vacío el semblante de los presentes.

Un texto creado de varios subtextos. Repleto de testimonios, relatos, anécdotas, y vivencias cotidianas que todas las mujeres viven día a día: Discriminación, humillación, injusticia, abuso. Entre muchas otra manifestaciones se vislumbran aquí se ponen en tela de juicio y se empuja al espectador a mirar desde su posición de responsabilidad.

La historia es un conjunto de críticas a la sociedad, a la cultura machista e la que tanto trabajo ha costado ir identificando y erradicando y a nuestro gobierno y sus iniciativas para la eliminación de la violencia de género.

Critica al mismo tiempo la anticrítica. El desfasamiento del problema central al cual debe atacarse y el ataque injustificado que ha llegado a tomarse y llega a provocar desorden e invalidez.

La puesta en escena es rica visualmente. No fue necesaria una carísima producción con un par de elementos bastó para ubicar a los asistente dentro de los escenarios y contextos deseados unos cuantos elemento de mano que las ayudaban en sus expresiones corporales de suma naturalidad.

La musicalización e iluminación deban atmósfera. En ocasiones la sensación de pesadez era más notoria que en otras. Incluso el calor se densificaba y se notaba en el rostro de los invitados la incomodidad del momento.

A pesar de la temática y la atmosferización el texto tenía una fuerte carga de ironía y humor. Se burlaban de lo cotidiano. De lo sarcástico de lo socialmente natural y en esos momentos era muy clara la denuncia que ellas hacían arriba del escenario.

Siendo hoy el final de esta temporada, las creadoras abrieron un espacio de diálogo con el público donde se conoció toda la labor que hay detrás de este trabajo. La revisión documental revisada y corroborada permitió dar realismo a la obra que pocas veces se ve.

Con muy buenos comentarios y críticas termina esta temporada con la promesa de regresar.

Sin pelos en la lengua estas tres mujeres exigen al gobierno a la sociedad y a las mujeres un alto al miedo con el que viven todos los días, ellas y todas.