Elisa Suárez: historias de la diversidad sexual en Morelia

Imagen Zayda Solís/Acueducto
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Ciudad de México| Acueducto Noticias/ Zayda Solís.- Pocas veces existe la posibilidad de conocer las consecuencias que tiene una película en sus protagonistas. Conversamos con Elisa Suárez Juárez, artista visual, directora de la película Noche Fui, cuyo filme cuenta la historia de vida de Hortencia Guadalupe, originaria de Morelia.

Hace unos años, cuando Elisa Súarez Juárez estaba en una búsqueda personal sobre la diversidad sexual conoció a Hortencia Guadalupe, gracias a una amistad en común, supo de la existencia de la red Monarcas Libertad, cuyas actividades están enfocadas en los derechos de las trabajadoras sexuales.

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Una amistad que detonó una película

Desde los primeros encuentros tuvieron buena comunicación, con el tiempo se hicieron amigas:
“Monarcas Libertad, son trabajadoras sexuales que se ubican en lo que en Morelia se conoce como La burbuja, están en la calle León Guzmán en el Centro”.
“Con la que hice más click, fue con Hortencia porque ella es muy platicadora, es muy amigable. De todas, creo que es la más cariñosa y sociable. Entonces empecé a platicar con ella junto con otra compañera y nos hicimos amigas”, recuerda.

Debido a que Hortencia tiene una gran memoria y es buena contando aventuras e historias que marcaron su pasado, en la confianza de la amistad con Elisa le comentó anecdotas sobre su infancia y adolescencia en la colonia Juárez, el trabajo sexual en la calle Manuel Muñiz. Los viajes a otros estados de la República, el desalojo de una zona de tolerancia en Morelia en la década de los 80 ‘s.
Eran demasiados acontecimientos que Elisa consideraba debían ser más conocidos, primero pensó en hacer una tesis de licenciatura, luego reflexionó que realmente ese escrito no sería evocador en las mismas protagonistas, entonces pensó en la fotografía y el cine.
“Tardé muchos años hablando con ella, me di cuenta de que quería contar su historia, pero no encontraba la forma de hablar de todo eso que a ella le sucedía, no sabía cómo. Porque pensaba que escribir una tesis es interesante pero eso no iba a llegar realmente a donde están ellas, porque muchas no saben leer y escribir”.

Se preguntaba, “qué caso tiene escribir una tesis que no será accesible para ellas. Pensaba que podría ser fotografía o quizá cine pero no sabía cómo”. El tiempo siguió su cauce, lo mismo que con las vidas de Hortencia y Elisa.

La última generación de Ambulante más allá

Hacia el 2020, Ambulante más allá abrió convocatoria para la séptima y última generación de cineastas desde la periferia. “Pasó el tiempo, lo dejé suspendido. Hasta que conocí la convocatoria de Ambulante más allá, me animé porque está dirigida a personas que quieren hablar desde su comunidad. Se enfocan en el proceso formativo de las personas que ingresan y de que las películas salgan, lo importante es contar la historia, no es necesario ser cineasta, o un gran fotógrafo. Sino que las historias se conviertan en películas, para que las personas conozcan historias de la periferia. Aprendí a hacer procesos cinematográficos, presenté el proyecto de Hortencia, así fue como hicimos la película”.

Cuando Elisa Suárez fue notificada de haber obtenido la beca en Ambulante más allá, le reiteró a Hortencia la idea de hacer un documental sobre ella, al principio no estaba segura de cómo sería su actuación en la película, pero, de todas maneras accedió. “Ya le había dicho (a Hortencia), pero solo quedaba en ideas, cuando salió la convocatoria le avisé, aunque no quedaba clara la idea, me dijo que sí y me preguntaba ¿Quieres que actúe? ¿Una entrevista? ¿Vamos a inventar una historia nueva?.

Imagen Zayda Solís/Acueducto

Con mirada en retrospectiva

Para la joven directora, después de dos años de este experimento cinematográfico, el cortometraje tiene detalles técnicos, “veo los errores técnicos, es normal que los tenga porque está hecha por personas que no nos formamos en cine. Pero con la historia si quedamos satisfechas, felices con lo que surgió de ahí”.

De los aspectos más comentados sobre Noche Fui, es que se trata de una historia de una persona real, no idealiza, ni busca victimizar a la protagonista, esto tiene que ver con la postura histórica que Elisa Suárez imprime en los diferentes formatos artísticos que trabaja: “aprendí que todo lo podemos ver con perspectiva histórica. En lo que hago trato de encontrar la historia de las cosas, para entender porqué sucede, a qué se debe, cuáles son los orígenes de ciertos fenómenos, por eso me gusta contar historias”.
Sobre los temas de la comunidad LGBTTTIQ+, reflexiona, “me gustan los temas de la diversidad sexual, porque es lo que a mi me cruza y tienen que ver con mi vida personal también. Me identifico con eso, las personas con las que trato de hacer esas historias comparten esas vivencias”.

Los frutos de Noche fui

Posterior a los aplausos y felicitaciones por contar la historia de Hortencia Guadalupe una mujer trans pionera en Morelia en difundir información sobre el VIH, la vida de la protagonista ha cambiado, es una figura conocida en el ámbito local.

Gracias al cortometraje Noche Fui, la historia de Hortencia a llegado a un gran público. El Archivo de Memoria trans México, hará un fondo documental con sus fotografías, es la primera mujer trans de Morelia cuya memoria es resguardada para escribir la historia de las mujeres trans a nivel nacional.

Este pequeño logro histórico fue una sorpresa agradable para Hortencia y Elisa, quien dijo sentirse feliz “Me siento contenta de que se dé a conocer su historia, porque creo que ella es una figura importante, la de ella y sus compañeras, sobre lo que vivieron. Son personas importantes en la historia de la ciudad”.

Sobre la creación del fondo Hortencia Guadalupe en el Archivo de la Memoria Trans “es muy importante porque su historia se podrá conocer fuera de la ciudad de Morelia. Estamos contentas de que su historia se dé a conocer en otros lugares. Son historias que se repiten en el país, además, hemos visto cómo las personas de las periferias en muchos casos son quienes han iniciado los movimientos y es importante que se les dé a conocer, no olvidemos que todo lo que tenemos ahora en cuanto a la diversidad sexual, es gracias a ellas, a las trabajadoras sexuales, a la comunidad trans y las personas con VIH”.

El cine hecho en Morelia

Continuando con el interés por comprender y contar historias desde la diversidad sexual, Elisa tiene un proyecto que incluye a la comunidad sáfica, “estoy escribiendo una carpeta de cine sobre mis amigas lesbianas, es un ejercicio de exploración, tratando de entender sus procesos y la comunidad lésbica en general, es su forma de existir porque creo que la comunidad lésbica está muy invisibilizada, al menos en donde yo vivo que es Morelia”.

Pareciera que hoy en día está de moda hablar de lo LGBTTTIQ+, en la práctica son pocos los discursos conocidos que dignifican la existencia desde una orientación sexual disidente.
“Estamos viviendo un momento en que lo relacionado a lo LGBT está siendo absorbido por el fenómeno de la moda, vemos la parte bonita, suave o enfocada a la comunidad gay o masculina, en ese sentido si está de moda. Pero no está de moda hablar de las cosas incómodas, sé que a mucha gente le parece incómodo hablar de las mujeres trans, no quieren abordar a profundidad el tema, no se adquiere un compromiso sobre esta población. Está de moda hablar de lo bonito, donde hay privilegios, se habla de la diversión y de pasarla bien, pero poco se menciona de los problemas que aún son importantes, se nos olvida que están ahí, en este caso la comunidad trans y en general del espectro LGBTTTIQ+” finalizó.