Santa Fe de la Laguna, Quiroga/ Alan Ortega
En el entronque al libramiento de Quiroga, el tráfico era visiblemente paralizado por un bloqueo de comuneros de Santa Fe de la Laguna y del territorio Purépecha, exigiendo la devolución de 40 hectáreas, en apoyo de los 43 normalistas desaparecidos de Ayotzinapa, y recordar a los muertos que dejó la defensa de la tierra de esa población.
Se observaba que los automovilistas que transitaban por la carretera Morelia-Guadalajara, se mostraban sorprendidos por la inusual toma, varios de los conductores esperaron pacientes a ver si se liberaba el bloqueo, otros daban la vuelta y regresaban.
Mientras tanto, los manifestantes se ubicaban al pie de un par de cruces lanzando rezos y oraciones, recordaban a sus compañeros caídos el 17 de noviembre de 1979, Antonio Yépez Lucas y Alejandro Yépez Fermín, por defender los bienes comunales en esa época, fueron emboscados en esa zona, justo en la entrada al territorio de esta comunidad.
El rezo se extendió por unos 25 minutos y era evidente el desespero de los viajantes que estaban acumulándose en filas cada vez más largas sobre la carretera.
Ahora los comuneros regresaban caminando tres kilómetros por la cinta asfáltica hasta llegar a su comunidad, dónde los bloqueos permanecían; ahora eran retroexcavadoras y piedras las que obstruían el paso.
Las comuneras que venían acompañando el contingente, se ubicaron bajo la sombra de los árboles haciendo los preparativos, pues la hora de ingerir alimentos se aproximaba, los hombres organizaban el bloqueo, repartían tareas para que esta actividad se llevara de la manera más organizada.
Los pronunciamientos comenzaban a escucharse desde los altavoces ubicados sobre el camino, ahora los comuneros no sólo hablaban de los problemas en su comunidad, también ahora estaban hablando de los últimos sucesos acontecidos en el Estado de Guerrero y mostraban apoyo a los familiares de los 43 normalistas desaparecidos en el municipio de Iguala.
Después del primer pronunciamiento se pronosticaba que el bloqueo sería liberado a la brevedad, caso contrario, comuneros encargados de la organización traían los autobuses que recorren usualmente este camino y fueron estacionados sobre la cinta asfáltica para evitar confusiones cuando la luz cayera.
Aun así, se esperaban reacciones por parte de algún grupo contrario y los comuneros se preparaban con este tipo de acciones preventivas.
Desde los altavoces se escuchaba el llamado para acercarse a dónde se estaba sirviendo Churipo, platillo tradicional de los Purépechas y el cual era servía en platos de plástico a todo el que se acercaba al lugar anunciado.
El bloqueo se terminaba de organizar, en un inicio un grupo de transportistas se ubicaban bloqueando el paso, después con tractores sobre la carretera, del otro lado una retroexcavadora con una bandera purépecha gigantesca bloqueaban del lado norte.
El movimiento duró toda la tarde este inicio de semana en que era fin de puente vacacional y que automovilistas pretendían llegar a sus destinos por esa vialidad.
