Morelia, Mich. | Acueducto Noticias/ Carlos Tapia Moreno.- Desde los campos de fútbol en Bom Jesus, Brasil, hasta el Coloso del Quinceo en Michoacán, la vida de Cláudio da Silva Pinto, conocido en el mundo del fútbol como Claudinho, es un testimonio de pasión, dedicación y un compromiso duradero con el deporte que ama.
Nacido el 12 de junio de 1968. “Nosotros en Brasil ya estamos pensando en futbol desde la panza de la mamá”.
Claudinho creció en un entorno donde el fútbol era más que un juego, que desde los cuatro años lo llevó a demostrar el talento de sus pies. “Siempre nos dedicamos al futbol”.
Sus habilidades sobresalientes y su amor por el deporte lo llevaron a buscar oportunidades en su ciudad natal con el equipo Esporte Clube Juventude, donde para llegar a primera división tuvo que pasar por las fuerzas básicas de ese club, y es que en Brasil se representan en casi 50 divisiones, pero eso no lo detuvo para debutar en primera división a los 17 años en el año 1987.
“Fue una emoción muy grande, no consigo explicar bien lo que sentí, solo entre 8 minutos, Felipao, ex entrenador de la selección me debutó como profesional”.
A medida que crecía, su pasión lo guio a través de una carrera internacional en el mundo del balompié, donde representó a varios clubes en gran parte de Latinoamérica. Su periplo lo llevó a experimentar la emoción de jugar en ligas de fútbol de alto nivel en lugares tan diversos como Ecuador, Paraguay y México.
Desde su paso por el Barcelona Sporting Club en Ecuador hasta su tiempo con el Cerro Porteño en Paraguay, y su participación con equipos como Puebla FC, Colibríes de Morelos, Atlético Celaya, Reboceros De La Piedad y Pachuca donde fue campeón en el año 2003 en el torneo apertura, Claudinho dejó su huella en cada campo en el que jugó.
“Yo no conocía del futbol mexicano, en Brasil en ese entonces no se hablaba del futbol”
Sin embargo desde su llegada tras ser pedido por el fallecido Tomas Boy, Claudinho se convirtió en jugador referente de la saga moreliana con sus 47 anotaciones, terminando como un ídolo hoy en día. “Fue el equipo que me abrió las puertas en el futbol mexicano”.
“El mejor recuerdo que tengo es que cuando anote el primer gol con Morelia estaba mi hijo detrás de la portería, y siempre que iba a jugar a cualquier equipo, siempre la gente preguntaba por mi hijo. Es una anécdota chistosa que queda ahí en la memoria”.
Hoy en día Claudinho se convierte en un apasionado promotor del fútbol juvenil. Después de colgar sus botines hace unos ayeres, encontró una nueva misión en la formación de jóvenes talentos.
Su papel como visor en el torneo «Ama el Futbol» en Morelia, Michoacán, es un testimonio de su deseo de dar a la próxima generación de futbolistas las mismas oportunidades y orientación que él recibió en su travesía.
“Yo me siento michoacano, llevo 8 años viviendo acá, tengo una hija de tres años que es Moreliana”.
La historia de Claudinho emblema en el futbol mexicano y sudamericano no solo se trata de lo que sucede en el campo durante los 90 minutos de un partido. Es una historia de perseverancia, superación de desafíos y pasión por el juego, quien tuvo la oportunidad de jugar con campeones del mundo como Nélson de Jesús e Silva “Dida”, hasta hoy ser impulso para jóvenes promesas como lo fue él en sus días como jugador internacional.
