Morelia, Mich. | Acueducto Online/Cayetano Mac.- Charlie es un tatuador que desde corta edad ha vivido entre México y Estados Unidos, lo que forjó en él una identidad de manera casi inmediata, su plan ahora de regreso a la ciudad que lo vio nacer, es traer un poco de esa cultura. “Mi nombre es Charlie Flores. Soy tatuador. Vengo de un estudio de tatuajes que se llama Sick Life y ahorita estoy por la apertura de mi tienda de tatuajes aquí en Morelia, que viene con el mismo nombre de lo que sería Sick Life 51 50.”
Él comenzó en el tattoo cuando tenía 18 años y regresó después de unos 7 años a Los Ángeles. “Cuando me fui de aquí la primera vez tenía cuatro años de edad. Después regreso a los 11. Estuve aquí en Morelia hasta los 18 y fue cuando partí para Estados Unidos. Lo del tatuaje lo empecé allá.”
-¿La barrera del idioma nunca fue un problema?
-La barrera del idioma no, porque siempre he estado, por ejemplo, cuando estoy allá en Estados Unidos siempre me he comunicado con toda mi familia que habla el español este y pues hablan el inglés. Entonces hay unas cosas que sí a veces traigo el mentado spanglish, y no es porque sea payaso, sino que hay veces que sucede.
Por su trabajo, relata que no siempre se ha podido quedar un lugar, y es que gracias al tattoo es que ha podido recorrer varias ciudades de Estados Unidos. “He radicado en diferentes partes de Estados Unidos, por lo que yo hago, soy tatuador, entonces empecé cuando llegué a Estados Unidos, empecé en Los Ángeles, ahí fue donde me proyecté como tatuador, de ahí me he movido a diferentes ciudades, desde lo que es Chicago, hasta lo que es Cincinnati, Ohio, lo que es Nashville, Tennesse, viajo mucho.”
-¿Cómo fue para ti el haber vivido tanto en México y Estados Unidos?
-La mezcla de culturas más que nada.Eso para mí fue muy confuso a la vez, fue muy, pero a la vez fue muy divertido porque en mis entonces yo empecé como graffitero cuando yo cruzaba diferentes partes de lo que era el área de Los Ángeles. A mi me llamaba mucho la atención cuando veía los murales, cuando veía lo que era el arte plasmado en las paredes. A mí fue lo que me llamó la atención también. Otra de las cosas, yo tengo unos primos que ellos son Low Riders, ellos tienen club de Low Riders. Entonces cuando yo veía esos dibujos plasmados en el carro, pues creo que en esos entonces como uno es chico, está joven, uno busca como una figura a seguir y pues realmente fue mi primo el que me motivó a estar en esto.
De su estilo, Charlie, menciona que él se inclina mucho por lo que es el Black & Gray, basado en lo cultural, lo que es chicano y el lettering, que consiste en hacer letras, esto apegado también a su cultura.
-¿Alguna anécdota que tengas aquí que te haya gustado de tu etapa como tatuador?
-Fíjate que fue hace poquito. Yo tuve la experiencia de un amigo mío que él llegó y me dijo Sabes qué, Charly, traigo la foto de mi esposa, pero quiero que la hagas como chicana, que le metas ese estilo, pero también quiero un hombre. Entonces para mí fue una experiencia muy, muy buena porque me dejó expresarme como artista, algo que no es muy común aquí, aquí tenemos un poquito o nos falta un poquito de abrir la mente para a veces permitirle al tatuador hacer su marca lo que su estilo.
Charlie también tiene un proyecto entre manos además de la apertura de su estudio de tatuajes en Morelia, consiste en una radio virtual donde se buscará darle reconocimiento y también en educar artísticamente a los que viven de este lado de América. “Aquí yo he visto que venimos y queremos un dibujo, pero muchas veces tenemos que darle la oportunidad al artista de que se desarrolle. O sea, tráeme la idea y yo me encargo de hacer una, de mejorar tu idea, porque ese es el trabajo de uno, es ese de las cosas que queremos utilizar nosotros, la radio urbana, para empezar a educar lo que es a la cultura de Morelia, lo que es a la cultura de Michoacán, lo que es a la cultura de México en diferentes, porque malamente aquí no hay educación, no hay esa educación artística como nosotros le llamamos.”