Acueducto Online | Samuel Ponce
1.- Decenas de medios de comunicación, sin corroborar en las fuentes gubernamentales, tratando de ganar la “gran noticia”, difundieron que fuerzas estatales y federales catearon un rancho en el municipio de Lagunillas, propiedad del ex gobernador Silvano Aureoles Conejo, en donde hallaron millones de dólares.
2.- La información tal cual fue creíble, entre comillas, solo por minutos, tras los cuales empezó a tambalearse, surgiendo un sin número de especulaciones, durante horas, para posteriormente, dar pasos a graduales elementos de aclaraciones y de precisiones, pero sin ningún certero, puntual, posicionamiento oficial.
3.- Y, en menos de doce horas, se empezó a desgranar parte de la verdad del caso, como que dicho rancho no era del ex mandatario michoacano y si del ex diputado y empresario Valentín Rodríguez, que el operativo fue de la Guardia Civil con el acompañamiento expectante de integrantes del Ejército Mexicano.
4.- Sin embargo, también quedaron dudas, entre ellas el verdadero motivo del cateo, porque no basta establecer que fue una reacción a una denuncia, así como la legalidad de la irrupción armada citada; además, de quiénes fueron los que filtraron que el lugar era del ex gobernante y que, ahí, había millones de dólares.
5.- Ante ese atrabancado operativo policiaco-militar, Silvano Aureoles lanzó los dardos políticos, configurando un escenario, en el cual él era el objetivo de una campaña morenista en el estado, para bajarlo de su ascendente nivel mediático que ha logrado como aspirante presidencial. Y, si, ciertamente, que hacian escoltas asignados al ex mandatario michoacano en dicho rancho