Morelia, Mich. | Acueducto Noticias.- En un tono firme, el presidente saliente de Estados Unidos, Joe Biden, expresó este jueves su desacuerdo con el plan anunciado por Donald Trump, presidente electo, de imponer aranceles del 25% a los productos provenientes de México y Canadá. Durante una conversación con periodistas en Nantucket, Massachusetts, Biden subrayó los posibles riesgos de esta medida para las relaciones con los aliados más cercanos del país.
«Lo último que necesitamos es empezar a estropear esas relaciones. Espero que se lo replantee», afirmó Biden, enfatizando la importancia de mantener la cooperación entre las tres naciones vecinas.
El Plan de Trump y su Contexto
Trump ha justificado esta decisión como una forma de presionar a ambos países para que tomen medidas más severas contra la migración irregular y el tráfico de drogas, en particular el fentanilo. Durante su campaña presidencial, el republicano había señalado su intención de implementar estas sanciones comerciales, una postura que ahora extiende a Canadá además de México.
El anuncio ha generado reacciones inmediatas de los líderes de ambos países afectados. La presidenta de México, Claudia Sheinbaum Pardo, y el primer ministro canadiense, Justin Trudeau, sostuvieron recientemente conversaciones telefónicas con Trump tras su anuncio, aunque los detalles concretos de dichas conversaciones no han sido completamente revelados.
Sheinbaum Responde con Diplomacia
En su conferencia matutina, Sheinbaum describió su conversación con Trump como “muy amable”, aunque admitió que los aranceles no fueron el foco principal de la charla. Según la mandataria, el diálogo se centró en temas de migración, el control del fentanilo y la seguridad.
“El tema de la migración de la frontera sur de ellos, norte nuestra, y el tema del fentanilo, son dos temas que le preocupan y ese era el argumento para imponer los aranceles”, explicó Sheinbaum.
Tensiones Comerciales en el Horizonte
La decisión de Trump ha encendido alarmas en ambos lados de la frontera y plantea interrogantes sobre el futuro del Tratado entre México, Estados Unidos y Canadá (T-MEC). Por ahora, los líderes de México y Canadá han optado por mantener un enfoque diplomático, mientras que Biden, en su último mes en el cargo, hace un llamado a la prudencia para evitar el deterioro de relaciones fundamentales para la estabilidad de la región.
El mundo observa con atención cómo estas tensiones comerciales podrían redefinir el equilibrio entre los tres países y las políticas internacionales de la próxima administración de Trump.