Morelia/Samuel Ponce Morales
En la Auditoria Superior de Michoacán se encuentra guardado un expediente original con los resultados de la revisión de la comprobación de los millonarios recursos, otorgados para gestión a los principales integrantes de la pasada legislatura local.
Y también copias de esos resultados las mantienen un selecto grupo de diputados locales, de las tres fracciones parlamentarias del PRI; PAN y PRD, pero bajo la condicionante de que no sean socializados a los medios de comunicación.
En la hasta hoy secreta lista hay actuales alcaldes, diputados federales y funcionarios públicos, quienes en sus tiempos de legisladores locales no lograron dar cuenta en qué se gastaron millones de pesos y a dónde fueron a dar cientos de toneladas de cemento y de fertilizante.
Es decir, los actuales diputados locales protegen a sus antecesores ante la posibilidad de que ellos sean a priori fiscalizados y expuestos no solo a sanciones contempladas en las normas correspondientes, sino por igual al escarnio público.
Aunque, más temprano que tarde esa gran relación podría salir a la luz pública, al tiempo.