Por Héctor Tapia
“Por aquí no puede pasar, tiene que ir hasta donde está el punto de revisión”, dice uno de los elementos de la Policía Michoacán que resguardan la zona que rodea el Palacio de Gobierno. Dentro de un par de horas Silvano Aureoles, Gobernador del Estado, habrá de rendir su Primer Informe de Gobierno.
Las personas que buscaban ingresar a la zona circundan la valla metálica dispuesta en las calles principales hasta que encuentran el acceso.
“Las cosas metálicas, monedas, celulares, llaveros, encendedores, todas en la charola, por favor”, remarca una joven policía mientras va pasando uno a uno a los asistentes. Una vez revisados recogen sus pertenencias y continúan su camino hacia el Palacio de Gobierno.
Varios reporteros apurados por el tiempo se quedan retenidos en la garita, a la espera de que Comunicación Social del Gobierno del Estado pase por ellos, los que tienen acreditación.
Frente al Recinto sede del Ejecutivo del Estado, sobre la Avenida Madero, una carpa cubre múltiples hileras de sillas que fueron dispuestas frente al Palacio donde arriban habitantes de diversas partes de la entidad. Llevan lonas y pancartas en apoyo a Silvano Aureoles.
Elementos de la Secretaría de Marina Armada de México hacen rondines alrededor del Palacio; en la azotea del edificio también se instalan elementos de seguridad para vigilar desde las alturas el desarrollo del evento.
La transmisión del Informe se programó a las 11 de la mañana. Fueron llegando representantes de los poderes Legislativo y Judicial, diputados locales y federales, gobernadores de varias entidades de la república, ex gobernadores de Michoacán, órganos públicos desconcentrados, alcaldes, empresarios, representantes del clero en el estado, del sector educativo.
Antes de ocupar sus respectivos asientos y esperar la llegada del Jefe del Ejecutivo del Estado, se saludaron, intercambiaron apretones de manos, abrazos con palmadas en la espalda y carcajadas. Algunos se pasearon de uno a otro lugar del patio central para continuar con el ritual de la cordialidad entre quienes, incluso, provienen de fuerzas políticas antagónicas.
Quienes ocuparon gran parte de los lugares fueron los ex dirigentes nacionales del Partido de la Revolución Democrática (PRD), partido del cual proviene el Gobernador del Estado, Silvano Aureoles; figuraron Jesús Zambrano Grijalva, Carlos Navarrete. También estuvo acompañando al mandatario la dirigente nacional de ese instituto político, Alejandra Barrales.
11:50 horas. El maestro de ceremonias pide que los invitados y los periodistas, quienes aprovecharon para adelantar entrevistas con algunos de los funcionarios y personajes que acudieron, tomaran asiento. El Gobernador del Estado había llegado al recinto. Le recibieron con aplausos.
Aureoles Conejo llega acompañado de Gerardo Ruiz Esparza, titular de la Secretaría de Comunicaciones y Transportes (SCT), fue en representación del Presidente de la República, Enrique Peña Nieto. Algunos habían apostado que sería Miguel Ángel Osorio Chong, Secretario de Gobernación, quien haría el acompañamiento.
Una vez instalados en sus respectivos asientos, luego de un largo recorrido de abrazos y felicitaciones al Mandatario michoacano de parte de los asistentes, Aureoles Conejo comenzó con su Informe, el primero de su gestión.
Lo primero en plantear fueron las circunstancias críticas en las que recibió la administración estatal, tanto en materia financiera como en el terreno social, derivadas de las condiciones de inseguridad y violencia que prevalecieron en el periodo de gobierno pasado.
Aureoles, con tono enérgico, continuó detallando estas condiciones y señaló que las condiciones de inseguridad desembocaron en el debilitamiento de las instituciones y disminución de la confianza de la ciudadanía hacia las mismas.
Mientras los asistentes enfocaban su atención en el discurso, Silvano Aureoles fue dejando claro que aunque fueron adversas las condiciones en que recibió la administración, su objetivo desde el principio ha sido revertir esta situación.
“No permitiremos que los que no quieren a Michoacán decidan”, enunció, y ya con la atención fija de los invitados continuó con una frase aún más contundente: “No permitiremos que la corrupción y la impunidad regresen”.
A partir de este momento el Gobernador del Estado fue refiriendo cada uno de los rubros donde su administración ha realizado obras y acciones; en su primer año de gobierno se replantearon las estrategias, dijo, y se enfocaron a tres rubros: Seguridad Pública, Finanzas y Educación de Calidad.
A lo largo de su lectura Silvano Aureoles iba deteniéndose por breves momentos para tomar agua. Fue detallando las acciones que se han realizado y a su vez también fue reconociendo que las transformaciones que Michoacán necesita no se darán de la noche a la mañana.
Al concluir su mensaje los invitados se pusieron de pie para aplaudir al mandatario, quien al bajar del templete recorrió con saludos nuevamente a los que estaban al frente.
“Muchachos, recuerden que las entrevistas, las que quieran realizar, son afuera”, dice personal de Comunicación Social del Gobierno del Estado a los periodistas que buscan llevar más información a sus redacciones. “Todas las entrevistas afuera”, remarca.
A prisa, funcionarios, políticos, invitados, periodistas, buscan salir del Palacio de Gobierno. Se aglomeran en la puerta lateral que desemboca en la Catedral. Cierra oficialmente el primer año de gobierno (aunque falten aún algunos días), y comienza el segundo año de gestión. Afuera los elementos de seguridad, aunque un poco más relajados, siguen vigilantes. Poco a poco el lugar se comienza a vaciar.