Morelia, Mich. | Acueducto Noticias.- El presidente de Corea del Sur, Yoon Suk-yeol, fue destituido este sábado 14 de diciembre tras la aprobación de una moción por parte del Parlamento. La Asamblea Nacional, compuesta por 300 diputados, registró 204 votos a favor, 85 en contra, tres abstenciones y ocho papeletas nulas, superando los dos tercios necesarios para validar la destitución.
La decisión fue impulsada por la oposición tras la declaración de ley marcial que Yoon realizó el pasado 3 de septiembre, una medida que había sido respaldada por miembros de su propio partido. Aunque el gobernante Partido del Poder Popular (PPP) no apoyó oficialmente la moción, al menos 12 de sus diputados votaron a favor, evidenciando divisiones internas.
Con esta destitución, el primer ministro Han Duck-soo asumirá interinamente la jefatura del Estado mientras el Tribunal Constitucional analiza, en un plazo máximo de 180 días, si el mandatario violó la Constitución con la imposición de la ley marcial. De confirmarse, Yoon sería el segundo presidente en democracia en ser destituido por la Corte, tras el caso de Park Geun-hye en 2017, quien fue encarcelada por corrupción.
La destitución desató celebraciones masivas en las calles de Seúl, donde miles de manifestantes, que habían exigido la salida de Yoon durante semanas, ondearon bastones luminosos en señal de victoria. El portavoz del opositor Partido Democrático, Park Chan-dae, calificó el resultado como «una victoria histórica para la democracia».
Actualmente, Yoon enfrenta investigaciones por delitos graves, como insurrección y abuso de poder, junto con otros altos funcionarios de su administración. La acusación de insurrección podría derivar en cadena perpetua o pena de muerte, aunque esta última no se aplica en Corea del Sur desde 1997. Por lo pronto, el expresidente tiene prohibido abandonar el país mientras avanza el proceso judicial.