Morelia, Mich. | Acueducto Noticias / Zayda Solís e Irene Valdivia.- Tras una serie de marchas en el país del Orgullo LGBT, desde hace un par de años referida bajo el anglicismo “Pride” de Michoacán, en donde Michoacán no fue la excepción, sobre todo en la capital michoacana.
En Morelia, en la céntrica avenida Madero, pese a la lluvia, entre diferentes banderas y canciones, marcharon, caminaron, cientos, miles, integrantes de la diversidad sexual.
Una lluvia que permitió a los ciudadanos usar coloridos, impermeables y sombrillas decoradas con los colores del arcoíris, contrastando con el gris del cielo y las banquetas de la avenida principal de la capital michoacana.
Las inquietudes
Ahí, en esa manifestación, Manuel, un estudiante de derecho de 20 años, quien reflexionó para Acueducto precisamente sobre la participación, aún con las condiciones climáticas.
“Tuvo algo que ver el clima porque mucha gente se empezó a ir cuando empezó a llover. Pero, aun así, quienes defienden los derechos a la diversidad sexual, de alguna forma permanecieron y se mantuvo y dio muy buen resultado”.
Dando seguimiento a anteriores sondeos que hemos realizado como Acueducto, en donde buscamos conocer la perspectiva de la ciudadanía moreliana con respecto a la diversidad sexual.
En esta ocasión, buscamos conocer la opinión posterior a la marcha citada, siendo especialmente jóvenes quienes más participaron en el sondeo y aportaron opiniones de mayor complejidad.
Entre los entrevistados, a la par del párrafo anterior, los jóvenes hablaron también desde la apertura de reconocerse, por igual, a sí mismos como parte de la diversidad sexual.
Coincidiendo con las condiciones climáticas que Manuel detectó como atenuante en la participación, Naomi y Elizabeth, dos jóvenes de 28 años, comparten:
“Llegamos un poquito tarde por cuestiones tanto del clima, y pues que teníamos otras que hacer. Pero sí estuvimos buen buen ratito sobre todo en el evento del Dj, y también estuvimos el evento de ballroom”.
Al cuestionar sobre la marcha, aunque la mitad de los entrevistados no acudieron, sí manifestaron un interés y un apoyo a las causas impulsadas dentro de esta actividad, algunas de ellas proviniendo desde la solidaridad y otras desde el asumirse parte de las comunidades sexo diversas.
Valeria Lizeth, una estudiante de 18 años refirió gustosa su participación en la amplitud de itinerario que se presentó al público ese día. “Me gustó mucho. Participé en ella y fue muy divertido todas las actividades que hicieron”.
El punto emblemático fue al anochecer del día de esa manifestación, con la presentación del icónico grupo Locomía, cuyos integrantes alegraron al público al movimiento de sus llamativos abanicos, y transcurrían como el show más esperado.
Ese concierto fue acompañado de talento local perteneciente a la diversidad sexual, quienes pudieron presentar también parte de sus actos a los cientos, miles, de espectadores.
Al respecto, Manuel compartió: “los conciertos que hubo estuvieron muy bien, la verdad, y lo que me gusta es que le están dando la participación a los locales, donde personas de la misma comunidad que tienen talento salen a expresarlo con su misma comunidad, en su lugar de origen”, celebra.
“Que los hombres salgan con faldas”
Aunque al pensar en posibles alternativas que puedan realizarse de manera paralela a esta marcha., Manuel también comparte “A mí me encantaría en lo personal y en lo particular que hubiera, por ejemplo, grupos de diversidad sexual.
Por ejemplo, agregó, un grupo de folclor como el que hay en Jalisco, donde se da la oportunidad de que los hombres salgan con falda, de que faldien, porque estamos mala o desafortunadamente en un estado un poco conservador, donde nos limitamos todavía al expresar ese sentir, esa emoción y ese gusto.
En este mismo sentido, la joven estudiante de arte de 18 años, Coatlicue, coincide con Manuel en el interés artístico de la población de la diversidad sexual.
“Siento que la comunidad en general es este muy artística, y siendo parte de la comunidad, parte de la comunidad artística y parte de la comunidad LGBT, sí me gustaría mucho que hubiera espacios artísticos o espacios donde se pudieran expresar libremente sin que hubiera agresiones”.
Andar también en bicicleta, en patines…
Pero los intereses detectados en este sondeo no se limitaron únicamente a las expresiones artísticas, sino también a las deportivas.
Naomi, quien se dedicará a la fisioterapia, comparte: “nos gusta mucho andar en bicicleta. El otro día platicamos, así como de que no hay un grupo que a lo mejor en ese día pudiera representarnos un poquito más a toda la comunidad que andamos en bicicleta, en patines, etcétera”.
La importancia de la marcha
Hoy finalmente, al cuestionar este medio. A los encuestados. Sobre sus expectativas en la erradicación de la homofobia a través de esta marcha. La respuesta sí fue. Diferenciada.
Por una parte, personas optimistas como Juan Carlos, de 32 años. Consideró que la marcha sí ayuda a erradicar la homofobia, pues obliga a las personas “a acostumbrarse al respeto hacia los demás.”
Coatlicue, por su parte, no es tan optimista. “De cierta manera lo visibiliza, pero siento que sí es muy difícil que las personas cambien de pensamiento, y creo que una marcha realmente sí hace una diferencia, obviamente, pero no va a cambiar totalmente a la sociedad”
Elizabeth, quien es ceramista, comparte con Coatlicue una perspectiva claroscura.
“Pues obviamente no tan de repente se va a acabar la homofobia, lleva muchísimos años tratando de erradicarse eso y va a seguir. Siento que ayuda para visibilizar, o un poco normalizar, aunque no es algo que se tenga que normalizar, solo algo que la gente debería ver como si nada”.
Finalmente, Baruc, un joven productor de 18 años, comparte una reflexión mucho más personal, dando su perspectiva como hijo de una familia lesbomaternal, nombre que reciben las familias integradas por hijos y dos madres.
“La idea de que, sin importar lo que diga la gente, pues esta gente es feliz existiendo solamente, y que hacer ese tipo de actividades es demostrar que no importa lo que la gente diga, ellos seguirán siendo felices, viviendo sin importar lo que los demás digan”.