Héctor Martínez, manejando contra la adversidad

(Foto: Cayetano Mac)
Comparte

Morelia, Mich. | Cayetano Mac/Acueducto Online. – El señor Héctor Martínez, un taxista de 66 años, a lo largo de su carrera ha tenido que pasar por diferentes acontecimientos, los servicios de transporte en plataformas digitales no han sido el primer obstáculo para los más curtidos en el negocio.

Fue el día 17 de febrero de 1985 cuando por primera vez Héctor, por el desempleo, tomó el volante de su nueva vida, y desde ese momento fue que encontró el trabajo al que le dedicaría el resto de sus días.

-¿Cómo era manejar un taxi antes de que existieran los nuevos servicios de transporte? –
-Anteriormente, cuando no tenías trabajo te metías de taxista. Hace años no existían los teléfonos con mapas, nosotros si no conocíamos alguna colonia debíamos pedir ayuda al pasajero para poder llegar a su destino. La ciudad también era más pequeña así que era más rápido aprenderse las calles y colonias, hoy en día, los nuevos operadores se reservan a decir que no van para esos lugares. –

Don Héctor comenta también la informalidad que había en ese entonces, y como, con el pasar de los años, empezaron a haber mejoras en el servicio. “Traíamos vehículos que caminaran, sin importar las condiciones. La ciudad era muy pequeña en ese entonces, su crecimiento fue un beneficio para todos”.

“Hace más de 35 años para atrás las concesiones eran propiedad de unas cuantas personas, no fue hasta el gobierno del ingeniero Cuauhtémoc Cárdenas que liberó el servicio de transporte taxi, a los choferes se nos concedió nuestras concesiones”, dice.
Y, agrega, pero fue hasta el gobierno del licenciado Tinoco Rubí, donde se empezó con la modalidad de vender concesiones por debajo del agua, porque los derechos de concesión esos los pagas por ley a la tesorería.
“Durante la campaña del entonces candidato presidencial, Miguel de La Madrid no hubo dinero para pagarnos, y uno de los dirigentes tuvo la idea de pedir concesiones y con estas pagarles a los taxistas, fue un engaño ya que nunca nos dieron nada, les trabajamos de a gratis, las plataformas no son el primer ni único problema que hemos tenido los taxistas”.

-¿Usted particularmente cómo ha mejorado su servicio en los últimos años?-
-Tanto yo como otros empezamos a aceptar pagos con tarjeta y transferencia bancaria, renovamos nuestras unidades, igualamos o bajamos la tarifa, no rechazar el servicio sin importar si no conozco la colonia o se encuentre lejos. Brindar un mejor servicio es la única forma de competir. Estamos en contra de las plataformas, pero eso nos ha beneficiado ya que algunos decidimos mejorar nuestro servicio para poder competir, ser atentos con el usuario, tener la unidad más limpia. – “Yo no tengo problema porque otras personas usen las plataformas de transporte, el sol sale para todos y cada quién está en su derecho de escoger. Lo que sí no me parece es que mientras nosotros tengamos que pagar revalidación, impuestos ante Hacienda, ellos solo deben de pagar el impuesto mismo de la plataforma, del que apenas un porcentaje se va al Gobierno y el resto a la plataforma”.

-Para finalizar, ¿A ti te gusta tu trabajo?-
-Yo amo mi trabajo, porque gracias a él he podido sacar adelante a mi familia. 38 años es poco para lo que mi taxi me ha dado-.
En la charla con Acueducto Online, Héctor que siempre mantiene la mirada en alto a pesar de todo lo que ha tenido que pasar y también muchos otros de sus compañeros y que se niegan a dejar morir el servicio de taxistas, u operadores de transporte público como a él le gusta llamarlo.

Don Héctor ha manejado en distintos sitios de taxis, hoy, él se encuentra en Maquinas Rojas, usa su respectivo uniforme y espera que pronto exista alguna solución sobre las plataformas de servicios digitales, ya que tanto él como muchos otros, solo quieren trabajar.