Morelia Mich| Metapolítica.- Los magistrados del Tribunal Electoral del Estado de Michoacán (TEEM) declararon la legalidad y validez de la elección de gobernador del Estado de Michoacán.
En sesión pública virtual, el Pleno del órgano jurisdiccional declaró que la elección celebrada el 6 de junio para elegir gobernador del Estado, cumplió con los valores y principios establecidos en la Constitución y el Código electoral del Estado Michoacán de Ocampo, en la cual el candidato postulado por los partidos Morena y del Trabajo obtuvo la mayoría de los votos.
Los integrantes del organismo jurisdicccional coincidieron en que las elecciones del 6 de junio representaron un ejercicio de democrático; y establecieron que hay elementos para determinar que la elección fue libre, auténtica y periódica, llevada a cabo mediante la emisión del voto universal, libre, secreto y directo.
En aras de garantizar la justicia electoral y con una actuación en el marco de la Ley, el Pleno del TEEM llevó a cabo el análisis sobre el cumplimiento de los principios y valores fundamentales de la elección, en el que se acreditaron que las garantías fueran tangibles y se constató el apego a la Ley bajo los principios rectores, “donde los ciudadanos fueron los protagonistas que decidieron con sus votos que será el Alfredo Ramírez Bedolla quien asuma la gubernatura del Estado”.
En su intervención, la magistrada presidenta Yurisha Andrade Morales, responsable de redactar la declaratoria de validez, señalo: “Durante la jornada electoral el voto nos iguala en las urnas sin distinciones y sin dar margen a discriminaciones de ninguna especie. Al ejercer el derecho a elegir a nuestros representantes y gobernantes, quedan de lado las profundas asimetrías que laceran a México y a entidades como la nuestra. Conforme a las reglas que nos hemos dado, tiene el mismo peso y valor el sufragio que emiten ricos y pobres, el que se ejerce en el campo o en las zonas urbanas, el que proviene de migrantes que ahora han podido ejercerlo por internet, el de los creyentes y el de los laicos”.
Al referirse a la declaratoria, expresó: “Durante el proceso electoral local en curso, todos hemos desplegado un esfuerzo operativo y técnico con el que damos garantías de certeza, los votos se contaron y se contaron bien. Tenemos un proceso sustentado en garantías tangibles, en vigilancia abierta de observadores nacionales e internacionales, de representantes partidarios, de funcionarios de casilla y de medios de comunicación, que pudieron ver cada actividad”.
La legalidad y validez de la elección a gobernador se determinó debido a que los actores del proceso electoral no lograron acreditar las causales que plantearon para evidenciar influencia o coacción indebida de algún tipo que pudieran desvirtuar o inhibir la libre expresión de la voluntad de los electores, la injerencia de poderes o personas ajenas, así como la existencia de actos o conductas de actores políticos, que hubiesen afectado de manera sustancial la libertad y autenticad de la elección, una vez resueltos los juicios de inconformidad y procedimientos especiales sancionadores que al efecto se interpusieron.
Los magistradas concluyeron aprobando por unanimidad la declaratoria.