Morelia/Redacción
De nueva cuenta, pero en fin de semana, en los días que en la capital michoacana los visitantes suelen pasear por el centro histórico, los normalistas realizaron otro plantón.
Por eso, gran parte de los habituales paseantes al corazón de la avenida Madero optaron por ausentarse, pese a que los normalistas propusieron un acto cultural.
Los inconformes se situaron entre la Catedral y el Palacio de Gobierno, teniendo casi a su alrededor cuando menos media decena de autobuses de pasajeros retenidos.
Ahí, encochados, corearon consignas antigubernamentales, exigieron la exoneración de cargos judiciales y el rechazo a la reforma educativa.
Era su mundo, porque escasos ciudadanos, como escasos ellos –menos de un centenar- se hacían presentes alrededor para, eso sí, disfrutar de los cánticos y de los bailables.
Las tardes y partes de las noches de este sábado y de este domingo no fueron igual en el centro capitalino, donde solo autoridades vestidos de civiles hicieron presencia.
