Morelia/Acueducto
Solo fueron diez minutos, suficientes para el protocolo de la llamada entrega recepción 73-74 legislatura local de Michoacán, en donde hubo desaire de al menos los líderes parlamentarios del Congreso del Estado, salvado el del PAN, Javier Estrada Cárdenas.
Básicamente el acto legislativo fue un encuentro entre el presidente de la mesa directiva de la pasada legislatura, Roberto Carlos López, y del actual, el de esta legislatura, José Antonio Salas; el primero, entrega y el segundo recibe, previas palabras de cortesía, de ambos.
No, no hubo mensajes con importantes contenidos, solo de carácter institucional, en especial el que entregó la documentación de la pasada legislatura, en donde habló superficialmente del contenido, desde el trabajo legislativo pormenorizado hasta el inventario.
Y, aparte de dos testigos, ahí estaba, de algún modo, dando fe, el contralor congresista Ignacio Alvarado Laris, uno de los más buscado por los reporteros que cubren la fuente legislativa, sobre todo para saber si sería el próximo tesorero de la 74 legislatura local.
