Morelia/Héctor Tapia
Hileras de niños con sus capas blancas, del Coro Sumando Voluntades, llevaban tiempo esperando. Algunos se sentaban en el suelo. Otros bostezaban. Llegaron desde temprano al Centro de Convenciones de la ciudad de Morelia, algunos llegaron desde las 10:00 de la mañana, dijeron.
Eran las 12:30 y aún no empezaba el evento donde estaría Miguel Ángel Osorio Chong, Secretario de Gobernación.
Algunos niños se inquietaron, comenzaron a jugar entre ellos, a reír.
“Silencio… Silencio”, suplicó una voz femenina. “Maestros ayuden a silenciar a los niños”, volvía a pedir. En cualquier momento entraría Osorio Chong.
Al no tener resultados con su llamado, volvió a decir “silencio”, pero ahora lo hizo en tono cantado. Repitió la palabra en el mismo tono en varias ocasiones, poco a poco los niños del coro empezaron a poner atención.
La dinámica funcionó apenas por unos minutos, y dado que no empezaba el evento, nuevamente comenzaban a brotar risas y juegos entre los niños.
Puso un reto: “a ver cuántos segundos sostenemos el silencio”, lanzó hacia los inquietos integrantes del coro. Y aunque de fondo, de otras partes se escucharon silbidos, por la desesperación de que no llegaba el Secretario de Gobernación, los niños guardaron silencio por un minuto. Luego por dos minutos.
Como no llegaba el Secretario de Gobernación y dado que el silencio era prácticamente imposible sostener, comenzaron a cantar. Sólo así se mantuvieron en una constante los niños que ya estaban aburridos.
Ahora sí, silencio. Ya viene Osorio Chong. Entra primero Roberto Campa Cifrián, Subsecretario de Prevención de la Secretaría de Gobernación. Luego entra por delante Salvador Jara Guerrero, apenas unos pasos atrás Miguel Ángel Osorio Chong arribó al salón del Centro de Convenciones, dialogando con la diputada local Daniela de los Santos.
Avanzaron, buscaron sus lugares. Estaban listos para comenzar, y los niños listos para cantar.
