“Mí líder…” (Fotogalería)

Imagen: Héctor Tapia
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Morelia/Héctor Tapia

Desde tres o cuatro cuadras antes de llegar a las instalaciones del Comité Ejecutivo Estatal del Partido Revolucionario Institucional (PRI), la circulación vehicular ya venía complicándose. Era mejor llegar caminando hasta las oficinas del partido y dejar el auto donde se encontrar un espacio.

Había que dar una muestra pública de unidad, por eso se dieron cita las organizaciones afines al partido, la de los obreros, la de los jóvenes, la de las mujeres, de los campesinos.

Todos llegaron cargando sus respectivas lonas de apoyo a José Ascensión Orihuela Bárcenas, desde una noche antes ya se había anunciado que sería el candidato.

Venían contingentes desde los distintos extremos del estado; llegaron desde Lázaro Cárdenas, por ejemplo, también de Pátzcuaro, Uruapan. Algunos ya estaban en Morelia desde un día antes, a la expectativa del anuncio, el cual se oficializaría con la firma única de quien resultó ser el ungido.

Todos estos contingentes, ya en la sede del partido, amontonados unos con otros, todos dispuestos a hacer ruido y a dejar constancia de su apoyo al precandidato de unidad.

El de los zancos y letrero del PRI ya caminaba, con dificultades, entre los cientos de priistas que se congregaron bajo la lona que cubría de los intensos rayos del sol.

Conforme avanzaba la hora algunos se iban apretujando en la parte frontal a donde llegaría el ahora precandidato.

“Mi líder…” se decían unos a otros cuando se veían. Compartían su política alegría, mientras una improvisada batucada retumbaba una y otra vez a manera de porra para “Chon” Orihuela.

De pronto todos se comenzaron a apretujar más. “La prensa de este lado por favor…”, insistía, sin frutos, uno de los que estaban ahí vigilando el evento. Imposible quedarse en un solo lugar cuando no había espacio.

Arriban al lugar del evento abierto César Camacho Quiroz, presidente del Comité Ejecutivo Nacional del PRI, le acompañan el Senador Emilio Gamboa Patrón, la Secretaria General del partido, y diversos funcionarios del comité en el estado.

Ya estaban en el tapanco los aspirantes que se quedaron en el camino, que querían ser el candidato. Se veía al alcalde moreliano, Wilfrido Lázaro Medina, a Víctor Silva Tejeda, delegado de la Secretaría de Desarrollo Social en el estado, el secretario de gobierno del estado, Jaime Darío Oseguera; el diputado federal Alfredo Anaya Gudiño; quien faltó al evento fue el empresario Adrián Huerta Leal.

Los abrazos entre unos y otros empezaron a fluir de manera previa a las intervenciones al micrófono.

César Camacho, al tomar el micrófono, eufórico, ya sudando por el calor que ascendía, exaltó el trabajo de unidad del partido, también que “Chon” Orihuela hará que el gobierno del estado permanezca en manos del PRI.

Más y más aplausos. Luego de la breve intervención del líder nacional del priismo, el ahora precandidato, tomó la palabra, región por región, fue mencionando los municipios, y a los militantes de cada una de esas zonas les fue agradeciendo su presencia. Su discurso se extendió por varios minutos. Era brevemente interrumpido por los grupos de animadores del partido que gritaban su nombre.

Tras concluir sus palabras, también, de manera inmediata, el acto fue clausurado. No hubo entrevistas con el líder nacional. Contrario a “Chon” Orihuela, se quedó a atender a una ya desesperada prensa, ya era tarde, y faltaba todavía salir de ese lugar que estaba saturado de carteles, lonas y militantes alegres que buscaban acercarse al precandidato.