Zacán, 46 años de tradición

Imagen: Vianey Cervantes
Comparte

Morelia/Vianey J. Cervantes

La Casa de la Cultura en Morelia, remite desde dar el primer paso en la entrada a la mejor época de México; las paredes y los caminos de cantera, cada arco, cada escalón, cada paso que das te envuelven en una atmósfera de arte, de tradición y de eternidad.

Cruzando los amplios patios y subiendo las largas escaleras de cantera, tras pasar por corredores con amplios ventanales y puertas de madera con cerraduras color oro, al fondo de uno de aquellos pasillos, se encuentra un sitio de techos altos y gran amplitud.

 Desde la lejanía logras de reconocer el ruido: las risas, la música… las amplias puertas se encuentran abiertas de par en par, al frente un escenario con una mesa larga y un enorme panel que anuncia en el XLVI concurso artístico del pueblo Purépecha, en la comunidad de Zacán.

Los medios y los puntuales asistentes esperan a los miembros de la mesa disfrutando unas galletas y un café; en una esquina del salón hay un par de ollas que anuncian un festín gastronómico en aquella rueda de prensa.

Antes de comenzar, un par de músicos en una esquina anuncian que tocarán una pirekua casi no conocida; entonces, al ritmo de sus guitarras con un perfecto requinteo, entonan en purépecha la tonada.

Al llegar los invitados de la mesa del presídium, las bocinas se detiene la música que antes amenizaba el ambiente para transmitir la voz de aquellos ahí presentes. Cada uno toma la voz y anuncia, por su parte, lo que será el concurso. La cita es el próximo 17 y 18 de octubre, en el auditorio de Zacán, donde habrá muestras gastronómicas, bailes tradicionales, exposición y venta de artesanías, música y comida. Además, en el concurso participarán más de seiscientos artistas, quienes participarán en las Pireris, Orquesta, Danzas y Bandas, donde podrán además ser ganadores de 10 mil hasta 37 mil pesos.

Además, habrá tres premios especiales: “J Santos Campos Aguilera” con 15 mil 500, “Domingo Ramos” de 18 mil 500 y “Tata Gervasio López” de 12 mil 500 pesos.

Comienza entonces una disputa; la organizadora Evangelina Méndez se quejó ante los medios del poco apoyo económico y el recurso que le quitó la Secretaría de Cultura al evento, se van turnando la voz entre los organizadores y cada uno pide lo que necesitan; menciona que los artistas incluso se tienen que dormir en la calle, que no tienen para darles de comer, que no tienen dónde llegar, entre otros detalles de logística.

Los dimes y diretes entre los organizadores y la representante de la Secretaría de Cultura no son bruscos, pero son francos. La Secretaría entonces se compromete simplemente a seguir manteniendo esta hermosa tradición de este pueblo escondido en la meseta purépecha, a pesar de “todos los sacrificios que han tenido que hacer el gobierno”.

Al terminar la rueda de prensa, todo se convierte en alegría y jolgorio; los músicos entonan otro par de canciones mientras los invitados degustan un delicioso atole de coco quemado directito de la olla de barro (uno de los 28 tipos de tole que puedes encontrar en Zacán), así como los nacatamales que sirven de dos en dos a los invitados las mujeres con su vestimenta típica.

Las bocinas vuelven a entonar la suave música de orquesta mientras los invitados continúan disfrutando de la belleza de la Casa de la Cultura, el sol que se colaba por las ventanas y la deliciosa comida tradicional Michoacana del pueblo purépecha.