“Mi granito de arena…”

Foto: Julieta Coria
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Morelia/Julieta Coria

Hace quince años que Marcela Bustos Mesa, da clases en la comunidad La Unión, en la colindancia con Lázaro Cárdenas Michoacán, proveniente del estado de Guerrero, ha acudido a la capital michoacana, a ser parte de la XV edición del Educador Popular de la CNTE en el jardín Morelos, hoy cubierto por una masa docente con algo en común.

“Hoy vengo a atender al taller popular por primera vez, la intención y espero que escuchar las estrategias y metodologías de trabajo que los compañeros de la Sección 18 han estado implementado en la comunidades para poder apoyar a nuestros compañeros sobre la enseñanza”.

Acompañada por dos de sus compañeros,  con café en mano, Marcela acudió desde temprana hora a Morelia, tras un recorrido de más de cuatro horas de camino, sentada resguardada del sol habla de las necesidades que tiene los docentes, sobre todo para incorporar el proceso-aprendizaje de los niños, “esa es la verdadera razón por la que estamos aquí”.

“Las comunidades requieren nuestro estado son la proyección de que en la comunidades se les de estrategias a los padres para poder sacar provecho de todo lo que existe en las comunidades “por ejemplo en Chamacuaro cuna de la escuela integral ha salido adelante en base a los que los profes les enseñan no solo a los alumnos, si no buscar una relación con los padres de familia para completar su educación”.

La gente no deja de  llegar a la plaza, cientos y cientos de docentes populares ha acudido para la inauguración de los talleres en donde se busca potencializar la educación, en un estado como Michoacán, rezagado en Educación.

Marcela, lo sabe y sabe que las comunidades rurales hace falta el apoyo del gobierno destinado a educación “no tenemos por ejemplo material didáctico, para alumnos y maestros, mobiliario, además de recursos económicos, porque son zonas marginadas.

En Chamacuaro, dice la gente se dedica al campo y la pesca, son pocos los recursos que se reciben y “a pesar de ellos es satisfactorio que la gente lleve a sus hijos a la escuela, son grupos pequeños regulares en donde la mayoría lleva a su hijos a sus zonas de trabajo y gracias a ello fomentamos que los dejen en la escuela lo que ha dado buenos resultados”.

La docente rural indica por ejemplo que en Petacalco, una zona rural para decorar, los habitantes se tienen que llevar a sus hijos a la recolección de pueda ante la necesidad abandonan las escuelas y eso es en donde nosotros interferimos para buscar que los niños acudan a las escuelas”

En sus quince años que lleva dando clases, Marcela considera que la preparatoria es el nivel educativo donde mayor rezago existe, “la mayoría no termina la preparatoria y por eso se busca reforzar ese nivel educativo”

Ella considera que se debe en parte a la escasa matricula de maestros, donde realmente el gobierno no ha atendido esa parte, es nuestra exigencia.

Sentada en la última fila de las miles que hoy se encuentran para recibir a los docentes populares, Marcela pasa la mañana tranquila, ríe en cada ocasión que puede con sus compañeros de al lado, ella sabe que hoy se toma un tema difícil, la educación, ni más ni menos, pero confía en que los procesos de enseñanza y lo que hoy compartirán, le ayudarán a mejorar sus procesos de aprendizaje a favor de los niños que tanta necesidad tienen.

A mí me da una satisfacción enorme apoyar con un granito en la educación en el país, desde que recuerdo siempre quise ser maestra, y ahora que lo soy quiero seguir creciendo y aprendiendo para transmitir los conocimientos a los que menos tienen…”