Diálogo, por el futuro del país

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Morelia/Héctor Tenorio

El primero que llegó fue Rubén Rivera Valencia, quien se ofreció a ser el moderador del programa de radio de Acueducto Online. Minutos después, aparecieron Jared Chávez Estrada, integrante del IV parlamento juvenil, y Dante García Ramos, delegado de diálogos Michoacán, ellos estuvieron platicando e interrumpieron su charla cuando apareció Cristina Reyna Orozco, directora general del Centro de Estudios de Formación Política.

El último que llegó fue Carlos Román Aguilar, integrante del Ateneo en Morelia. Todos fueron recibidos por las productoras del programa de radio: Vianey Cervantes y María Fernanda Zavala.

La trasmisión se retrasó algunos minutos, ya que surgieron problemas técnicos. Por fin, Rubén Rivera saludó al público en redes, y anunció el tema del programa: ¿Estamos en una sociedad apática?  De inmediato presentó a los invitados.

Atrás del espejo de la cabina, Vianey Cervantes y María Fernanda Zavala coincidieron que el programa de radio visibilizó la necesidad de dar mayores espacios para los jóvenes.

Jared Chávez aseguró que vivimos en una sociedad en la que a la gente no le gusta involucrarse, “hay bajos índices de participación, entre las causas es que existe censura y se nos impone una línea, pero también la mala situación financiera hace imposible que uno estudie una maestría. La realidad es que los jóvenes que no somos conformistas somos minoría”.

Dante García inició su participación citando al escritor peruano Mario Vargas Llosa, quien afirmó que la gente en México no sale a votar porque sabe quién va a ganar. Además, se quejó de la falta de espacios para los jóvenes.

“La sociedad mexicana recibe información muy negativa, como es el caso de los jóvenes apodados Los Porkis, quienes violaron a una menor de edad y están libres. La democracia no solo se trata de ir a votar. Tenemos que cooperar y proponer, no es posible que el gobierno solo cuente con el 23 por ciento de la aceptación popular”

 Por su parte, Cristina Reyna consideró que el conformismo de los jóvenes es parte de un fenómeno global, donde se prioriza el mercado y se inhibe al ser humano en la construcción de la realidad.

“Aceptamos con normalidad la indiferencia de las personas. Es alarmante  como se está expandiendo el conformismo y la apatía. Tenemos que involúcranos más si queremos solucionar los problemas”.

Desde el punto de vista de Carlos Román el conformismo y la apatía van de la mano.

“La mayoría de los jóvenes nos percibimos como optimistas, pero también como flojos. Nuestro país  necesita profundas  transformaciones y el problema es que nos concebimos como individualistas y no como ciudadanos. De cada 100 mexicanos, solo a 19 le interesa la política”.

 Así terminó el primer bloque del programa.  Vianey Cervantes y María Fernanda Zavala entraron a la cabina, dieron algunas indicaciones técnicas mientras los muchachos tomaron agua, el calor fue insoportable.

La mecánica se repitió, abrió el segundo bloque Rubén Rivera, pero esta vez le pasó el micrófono a Cristina Reyna, quien comentó que el estudio de la realidad es complicado y no es fácil involucrar a los ciudadanos, ya que al 80 por ciento no le interesa participar en la solución de los problemas.

Le respondió Carlos Román, “los que participamos en el debate de ideas somos siempre los mismos, para la mayoría es más divertida una fiesta. Nos quejamos pero cuando nos toca actuar  no lo hacemos”.

Dante García consideró importante exigir derechos y levantar la voz, pidió no excluir a las mujeres, “hay que salir a las calles, rescatar las canchas, las plazas. El gran reto es vencer la corrupción”.

Jared Chávez pidió a quienes nos sintonizaban que presionen a sus diputados para que legislen a favor de la mayoría de las personas. Carlos Román coincidió en ese punto y puntualizó que se deben hacer leyes con una visión de género y que impacten en los jóvenes. Dante García, emocionado, llamó a la juventud a expresarse en las urnas en el 2018.

Después, empezaron a discutir sobre si era necesario obligar a las personas a votar, como sucede en Brasil. Los muchachos jamás se pusieron de acuerdo.

Llegaron los mensajes y una de las preguntas terminó incomodando a los invitados. “¿Se debe legalizar la marihuana?”.

Todos respondieron con cautela, procuraron no profundizar en el tema, quizá la pregunta descubrió su verdadero rostro. Ellos solo imitan a los líderes que dicen combatir.