Crónica. Más allá del olor a cantera…

ACG
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Morelia/Julieta Coria

La Casa Natal de Morelos en Morelia, remite desde la entrada a la época colonial, entre caminos de cantera, cada arco cada escalón envuelve en un aire fresco de artes, de cultura y de tradición.

En el Jardín trasero, se ubica el jardín, donde se encuentra un busto del Siervo de la Nación y frente a él una réplica de la campana que el cura Hidalgo tocaría en la madrugada del 16 de septiembre de 1810, el llamado a la Independencia de México.

Un aire de arte se respira en el ambiente,  entre los rayos del sol y un ambiente fresco se prepara el lugar para exhibir artesanías locales de la ciudad, que no han sido descubiertos ni siquiera por los propios morelianos.

De grandes cajas de cartón empiezan a salir las coloridas artesanías, desde figuras de barro, elegantes catrinas, rostros de cantera, utensilios de barro, juguetes de madera y hasta la figura de Frida Kahlo y Diego Rivera juntos en una enorme silla.

Las bocinas vuelven a entonar la suave música los pocos invitados continúan disfrutando de la belleza de la Casa de la Cultura, el sol que se colaba por las ventanas y la hermosa artesanía tradicional Morelia, un pueblo purépecha.