Y, el del verde olivo se echó dos “palomazos”

Foto: Enrique Castro
Comparte

Morelia/Enrique Castro

En el patio del cuartel Morelos una carpa cubría las redondas mesas y la alta mesa para las autoridades militares y gubernamentales.

La XXI zona militar en Morelia está de fiesta al igual que las fuerzas armadas en todo el país, ya que hoy se festeja el CV aniversario del Ejercito mexicano. Y para eso, se organizó un gran desayuno para los elementos, así como un par de discursos.

Los tres poderes en el estado estuvieron presentes junto a comandante de la zona el General Gerardo Mérida Sánchez.

En las mesas se colocaron elementos con uniforme de gala junto a algunos familiares y funcionarios del gabinete del gobierno del Estado.

Los instrumentos de la banda de guerra lucían en el suelo frente a la bandera que ondeaba en la asta central, esto hace suponer que las actividades comenzaron desde temprano en el lugar.

Mérida Sánchez, comenzó el discurso oficial con un pronunciamiento sobre el reciente accidente de una aeronave militar en Oaxaca y que dejó 13 perdidas civiles. Después, leyó el mensaje que el secretario de la Defensa Nacional mandó a todo el personal y enalteció la labor de las fuerzas castrenses en materia de seguridad y ayuda a la ciudadanía.

Durante el evento, el desayuno aún se encontraba en la cocina y los meseros formados en los costados, los platos plateados lucían vacíos y los asistentes atentos a los que ahí se decía.

Llegó el turno del gobernador Silvano Aureoles y ofreció unas palabras de felicitación y aliento a los militares. Mientras esto sucedía, al fondo, un mariachi vestido de verde, pero no olivo, llegaba de manera no tan discreta y se colocaba en una tarima con micrófonos.

Una soldado, recitó una poesía alusiva al trabajo de las mujeres dentro de las fuerzas armadas y la difícil situación familiar que enfrentan al momento de decidir reclutarse.

Las palabras terminaron y todos se dispusieron a desayunar en tres tiempos. El mariachi comenzó la música para amenizar los alimentos y las canciones a escuchar fueron un repertorio de música tradicional mexicana y sobre todo, Michoacana.

Un elemento que los mariachis apodaron amistosamente “Güero” subió y canto dos “palomazos”.

Sin avisar, las autoridades civiles en goteo fueron retirándose del lugar dejando a los festejados desayunando y conviviendo.