Morelia/ Juan Ignacio Salazar
El hogar de la mariposa monarca en Michoacán es extenso, unas 16 mil 100 hectáreas que comprende los municipios de Contepec, Senguío, Angangueo, Ocampo, Áporo y Zitácuaro.
La zona, fue declarada Patrimonio de la Humanidad por la Unesco, luego de documentarse ampliamente el fenómeno natural que representa el proceso de hibernación de la mariposa que vuela más de 8 mil kilómetros
Para llegar a los santuarios de la mariposa en Michoacán se recomienda enfilar rumbo al Pueblo Mágico de Angangueo, el cual colinda con el Estado de México, muy cerca de la comunidad El Oro y donde además se puede disfrutar del pasado minero del pueblo.
El Rosario, el sitio de hibernación del lepidóptero, cuyo recorrido se puede realizar a pie o a caballo entre arboles oyamel, pino y cedros, a una altitud de 3 mil 200 metros sobre el nivel del mar.
Sierra Chincua es el segundo de los santuarios en el que además del insecto se pueden apreciar ascensos por llanos y montañas con riachuelos al fondo de cañadas.
Santuario Ejido El Capulín, se ubica cerca de Valle de Bravo, desde donde se puede accesar al Cerro Pelón. El recorrido, de cuatro kilómetros, va acompañado de bellos paisajes de bosques de coníferas que conducen a esta elevación donde hiberna la mariposa.
El santuario Piedra Herrada, se ubica en las faldas del nevado de Toluca, por lo que el paisaje está constituido por imponentes montes de oyamel a más de 3 mil metros de altitud, zona propicia para el lepidóptero crezca y se reproduzca.
Santuario La Mesa, se sitúa los pies de las montañas que separan Michoacán y Estado de México. En la zona existe un parador turístico dotado con cómodas cabañas, restaurantes, miradores y senderos ideales para andar en bicicleta.
